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Supremacía águila

Por Staff Códice Informativo - 14/12/2014

En último partido de Mohamed como su DT, América logra el título 12 de su historia, tras vencer 3-0 (3-1 global) a Tigres, que acabó con ocho jugadores en la cancha

 Supremacía águila

América conquistó su título 12 en la Liga mexicana, luego de vencer 3-0 (3-1 global) a los Tigres de la UANL para levantar el trofeo del Apertura 2014.
Con esta Copa, los azulcrema, que disputaron su tercera final en dos años, superan por una a las Chivas Rayadas del Guadalajara.
Antonio Mohamed conquistó su segundo campeonato en México y dejará el timón de las Águilas, que se convirtieron en el cuarto equipo que se corona como líder del certamen, uniéndose a Toluca (tres veces), Pachuca (dos) y Santos (una).
Desde un inicio los nervios se apoderaron de los jugadores americanistas. Un error de la defensa local, casi se convierte en un autogol. En un balón que retrasaron a Moisés Muñoz, el portero no alcanzó a controlar y el esférico casi se clava en la portería azulcrema.
Las Águilas respondieron con un disparo de Michael Arroyo, que pasó zumbando el poste izquierdo de la portería de Nahuel Guzmán. El argentino sólo le echó la vista al esférico.
El conjunto dirigido por Antonio Mohamed adelantó líneas al ver que el planteamiento del cuadro de Ricardo Ferretti era defensivo; sin embargo, cuando tenían oportunidad de subir, se conjuntaban a velocidad Joffre Guerrón y Edgar Lugo.
Cuando seguía presionando el América, el árbitro Paul Delgadillo detuvo las acciones por un momento, debido a un láser que apuntaba al portero de Tigres desde la tribuna y que le molestaba para despejar. El portero felino se quejó por la situación, y cuando se reanudó, la afición se hizo notar con el clásico “¡Puuuuuto!”.
El partido se volvió ríspido y muy frenado por las faltas de ambos equipos.
Los felinos estuvieron muy cerca de abrir el marcador, en un centro de Damián Álvarez, que buscaba el remate de Guerrón. El ecuatoriano se lanzó pero sólo viajó en el aire, al no alcanzar el esférico.
El juego se volvió de ida y vuelta. Los de Coapa, con un zurdazo de Martín Zúñiga, contestaron con un contragolpe, pero el disparo salió a unos metros de la portería.
Minutos después, el Estadio Azteca se cimbró con un golazo de Arroyo, quien ya había avisado con dos disparos desde fuera del área. El ecuatoriano recuperó el esférico entres cuartos de cancha, se quitó a Hugo Ayala y a José Rivas por velocidad, entró al área y fulminó a Nahuel con un bombazo de zurda que fue al poste del portero.
Cerca de la finalización del primer tiempo, Jesús Dueñas cobró una falta por la banda izquierda para buscar a un compañero, pero su disparo se fue hacia la portería, pero Muñoz rechazó adecuadamente.
En el complemento, el Tuca metió a Emmanuel Villa por Lugo, e inmediatamente fue recibido con una falta; en el tiro libre Muñoz rechazó con los puños, que se convirtió en contragolpe. América estuvo muy cerca de ampliar su ventaja, pero la defensa universitaria, estuvo atenta para frenar al ataque.
Tigres estuvo cerca de empatar, en un pase filtrado a Guerrón; el ecuatoriano se enfiló solo de frente a la portería americanista, pero el portero azulcrema salió a cortar el pase.
El grito del Azteca se hizo escuchar, luego de un remate de cabeza de Oribe Peralta en el área chica que Nahuel mandó a tiro de esquina con grandes reflejos.
Las Águilas recuperaron el dominio del encuentro, pero sin llegar a inquietar al portero de Tigres.
América buscó el segundo y su recompensa llegó al minuto 61, en un cobro de tiro libre desde la banda izquierda, el balón viajó y Pablo Aguilar, con un gran cabezazo, remató entre varios defensores y clareó a Nahuel Guzmán.
Después del gol, al equipo del Tuca Ferretti se le vino la noche encima con tres expulsiones en ocho minutos.
Primero, el recién ingresado Darío Burbano, se hizo expulsar al ser el último hombre de su equipo, al detener un ataque de Miguel Layún, al minuto 63.
Tres minutos después, Damián Álvarez perdió la cabeza, soltó un puñetazo y el silbante lo vio. Roja directa para el naturalizado mexicano. Tigres se quedaba con nueve.
Y al 71’, el portero Nahuel Guzmán, sin tocarlo, levantó la pierna sobre Arroyo, jugada que calificó el árbitro por la intensión, y con doble amarilla, también se fue para las regaderas.
Aún faltaba otro grito de goooool y otra expulsión. Primero llegó el tercer gol americanista; en medio de una gran polémica arbitral por sacar rojas a diestra y siniestra, por los reclamos de Tigres y la viveza americanista, Juan Carlos Valenzuela le bajó un balón a Oribe Peralta, que remató de aire con pierna derecha para vencer a Palos, el portero suplente felino, que entró por el expulsado Nahuel.
Sin embargo, faltaba otra tarjeta roja, ahora fue para un americanista. Luis Ángel Mendoza, quien había entrado al minuto 73, siete minutos después salió expulsado, al tener una discusión con Dueñas, el de Tigres le dio un manotazo en la cara y el americanista cayó. Delgadillo decidió y apoyado en sus asistentes, le sacó la roja al americanista, pero ya estaba decretado a favor del conjunto de Coapa.


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