Croatas: Selección de los niños de la guerra

Croacia es  un país con de 4.4 millones de habitantes. El deporte y principalmente el fútbol han sido elementos que le han ayudado a superar el capítulo de crueldad y devastación vivido tras el conflicto bélico de la década de los noventa.

La Selección Croata tiene 21 de 23 jugadores que  vivieron junto con sus familias el capítulo de la guerra de los Balcanes. Niños que fueron desplazados, separados de sus familias y que incluso quedaron huérfanos y en su mayoría fueron marcados por las atrocidades de la guerra son el rival que México deberá enfrentar esta tarde en el Mundial de Brasil.

Los jugadores del representativo croata en su gran mayoría militan en equipos de las ligas más competitivas del Continente como Italia, Inglaterra, España, Alemania, Ucrania, Rusia y Grecia. Todos ellos tiene como tal un joven pasado tras la separación de la otrora selección de Yugoslavia.

La selección de Croacia se enfrentó en la eliminatoria rumbo al mundial a Serbia, inmerso en un clima de profundo rencor. Davor Suker Presidente de la Federación Croata de Fútbol logró trasladar ese odio a una unidad nacional que le diera no sólo identidad como equipo, sino como nación en torno a su seleccionado.

Uno de los íconos de la selección croata es Luka Modric, estrella del Real Madrid; fue parte de los 2 millones de desplazados, vio como un comando asesinaba a sangre fría a su abuelo, obligando a su familia a  huir.

Hoy el destino tiene a estos “niños de la guerra” en la justa deportiva más importante del mundo enfrentando a la selección azteca, en lo que se espera un gran juego.

Sin duda, el destino ha marcado a los jugadores croatas, dándoles la personalidad y fuerza necesarias para anteponerse a la adversidad. Ese factor juega en contra de México quien tendrá que hacer uso de la entrega y convicción necesaria para superar a un equipo con esa mística.