Se busca marido millonario
Una mujer de nombre Rafaela recientemente publicó, en la sección de finanzas de un periódico de alta circulación en la ciudad de Nueva York, un anuncio en el que solicitaba consejos para conseguir un marido millonario.
Sin dar rodeos, la joven de 25 años se introdujo a si misma como una mujer «muy hermosa, bien formada y con clase» dispuesta unirse en matrimonio con un individuo que, como único requisito, debía ganar más de medio millón de dólares al año. Rafaela agregó que anteriormente había salido con hombres que ganaban 250,000 dólares al año, sin embargo estos no eran capaces de proporcionarle el estilo de vida y el lugar de residencia deseados, asimismo solicitó consejos por parte de aquellas mujeres que vivieran en una condición similar a la que ella buscaba.
Esta historia es prueba de que la realidad supera a la ficción, sobre todo porque ante semejante publicación hubo una respuesta por parte de un individuo que cuadraba perfectamente con la solicitud de la mujer; un adinerado hombre de negocios se tomó el tiempo de contestar directa, pero siempre cordialmente, al anuncio de Rafaela, sugiriéndole que el negocio que proponía era pésimo. Entre los argumentos que el hombre presentó se encontraba el hecho de que los bienes que ella ofrecía (buena figura, juventud, belleza) eran valores que se encontraban en depreciación progresiva, pues están destinados a acabarse eventualmente, mientras que la riqueza económica de él era una condición que probablemente aumentará con el tiempo. El empresario agregó que Rafaela estaba en la situación ideal para ser vendida, pero no para ser comprada y conservada, así que en su respuesta también le propuso una nueva versión del negocio: un alquiler, a través del cual él pagaría por los bienes de Rafaela hasta que estos se agotaran. Así, con la misma sinceridad que la joven hizo su extraña solicitud, recibió una respuesta que demostró que entre las cosas que el dinero no puede comprar se encuentran la inteligencia y, desde luego, la habilidad para hacer negocios.
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