México SA/Carlos Fernández-Vega/La Jornada
En materia petrolera, el calderonista fue otro “sexenio perdido” para el gran capital privado, nacional y trasnacional, porque no logró avanzar sustancialmente –a pesar de […]
En materia petrolera, el calderonista fue otro “sexenio perdido” para el gran capital privado, nacional y trasnacional, porque no logró avanzar sustancialmente –a pesar de todas sus intentonas por desmantelar la propiedad del Estado– para que el control y usufructo de ese recurso estratégico pasara a manos particulares. Cero y van cinco administraciones al hilo que han hecho hasta lo impensable por ceder el oro negro a terceros, y la tecnocracia neoliberal de plano no ha pasado de ciertas fronteras.