Turismo enológico
El turismo enológico o enoturismo pone énfasis en los productos, servicios y experiencias relacionadas con la industria del vino pero a su vez guarda una estrecha relación con el turismo gastronómico, cultural y comunitario o rural.
Según el Consejo Mexicano Vitivinícola, en nuestro país casi la mitad de los estados de la República son productores de vino. Aguascalientes, Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Coahuila, Durango, Guanajuato, Jalisco, Nuevo León, Querétaro, Puebla, San Luis Potosí, Sonora y Zacatecas cultivan más de una decena de variedades de uvas creando una cadena de valor que inicia con los más de 500 mil jornaleros dedicados a la tarea agrícola de la uva, hasta el comercio digital de las 2.5 millones de cajas de botellas que se producen en México.
Sin duda, la industria vitivinícola resulta estratégica para el desarrollo de diversas zonas repartidas por el centro-norte del país, pues su auge detona una nueva modalidad de turismo especializado que permite ampliar la oferta hotelera, restaurantera y de servicios. Viñedos, bodegas y vinícolas se han convertido en centros de atracción de eventos sociales como bodas, festivales, conciertos o eventos de negocios que atraen a millones de visitantes, pero también, son espacios visitados regularmente los fines de semana por miles de turistas que buscan una nueva opción de disfrute ocasional.
El turismo enológico o enoturismo pone énfasis en los productos, servicios y experiencias relacionadas con la industria del vino pero a su vez guarda una estrecha relación con el turismo gastronómico, cultural y comunitario o rural.
Es decir, la modalidad del turismo del vino resulta una actividad primaria con un gran potencial, por lo que se requiere legislar y enfocar sobre medidas específicas para aumentar la atracción de inversión en el sector, bajar los precios al consumidor y fomentar el consumo del vino local. Asimismo, es fundamental promover cambios fiscales para eliminar el Impuesto Especial sobre Productos y Servicios (IEPS) al vino mexicano para volverlo más competitivo frente a los vinos extranjeros que concentran el 70 por ciento del mercado nacional.
El sector turístico representa más del 8 por ciento del Producto Interno Bruto en México y el tipo de turismo enológico puede y debe ser parte del planteamiento para elevar la participación del turismo en este indicador macro económico.
Tenemos como país una gran oportunidad en frente para provocar la alza en un nuevo segmento turístico que genere desarrollo, bienestar y progreso en amplias latitudes de nuestro querido México. El enoturismo debe ser visto ahora como una nueva política de estado.
José Báez
Diputado Federal. Abogado y maestro en comunicación política y gobernanza estratégica por The George Washington University. Ganó el Napolitan Victory Award en 2017 por mejor investigación académica. Fue diputado local, coordinador de gabinete del municipio Corregidora, Querétaro y Presidente Estatal del Partido Acción Nacional en Querétaro, México. Facebook: José Báez IG: pep_baez Twitter: Pepe_Baez baezaccion@gmail.com