Son tiempos de definiciones en pro de México

Frente a los brutales embates del presidente Andrés López Obrador, para destruir a toda costa el sistema democrático, político y electoral que rige en México, nadie debe quedarse a la espera del resultado caótico que daría al presidente el poder constitucional omnímodo de manipular a su antojo los procesos electorales, sus resultados, los dados personales de los 94 millones, 776 mil, 387 empadronados en el Registro Nacional Electoral, a cargo del INE.

El titular del Poder Ejecutivo pretende regresar a los peores tiempos en los que la “democracia” estaba en manos del gobierno, que hacía ganar al partido hegemónico todas las elecciones, desde ayuntamientos, diputaciones locales, legisladores federales y presidencia de la República. El aviso fin del presidente López.

Lo más lamentable, que las rémoras de partido que lo acompañan, están dispuestas al suicidio político con tal de darle todo el poder a un solo hombre.

El presidente de la República, sin consideración alguna vitupera, calumnia, miente y deslegitima el excelente trabajo que han llevado los organismos independientes del gobierno, ajenos al poder político del gobernante en turno. No tolera la autonomía del INE y a los consejeros electorales; tampoco acepta a los magistrados del TEPJF. De paso a la SCJN cuando emite fallos en contra de actos inconstitucionales del presidente López Obrador.

Hastiada la ciudadanía se ha organizado para hacer un frente común en contra de los abusos de AMLO, para que la oposición, desde las Cámaras de Senadores y de Diputados, verdaderamente levanten un muro legislativo infranqueable que impida la acometida del abusivo y arbitrario presidente López.

La sociedad organizada despierta para exigir a los actores políticos que impidan la “transformación del sistema político-electoral mexicano. El 13 de noviembre habrá movilizaciones en, al menos, en 12 estados de la República Mexicana, alzando la voz para ser escuchados.

No importa que AMLO critique a esos millones de mexicanos. Seguramente ya olvidó cuando él encabezaba movilizaciones como estrategia para conseguir prebendas, quemaba pozos petroleros, invadía avenidas, hacía plantones y, al final obtenía jugosas cantidades de dinero para calmar su sed económica. Ahora resulta que al “demócrata” le molestan las manifestaciones y movilizaciones populares en su contra.

Es tiempo de definiciones radicales. Es momento en que la oposición política asuma su papel, salga del marasmo y también se una al grito de: ¡Ya basta de abusos y atropellos del presidente López!

Alejandro Moreno Cárdenas, dirigente nacional del PRI (con sus vaivenes), adelantó que los priistas también se sumarán a las marchas de protesta en todos los estados en que habrá movilización ¡Por fin se decide! Dijo no estar dispuesto a que Morena “desaparezca” al INE y al TEPJF.

Seguramente el PAN y el PRD harán lo mismo; deben emular la inconformidad; están obligados a sumarse a la demanda ciudadana de millones de mexicanas y mexicanos. Movimiento Ciudadano siempre jugando al “independiente; de ese partido todo se puede esperar. O bien, justifica que con el PRI no quiere tomar acuerdos. En este caso la suma de la oposición política, la verdadera oposición, debe ser en favor de la ciudadanía organizada, pensante, trabajadora, productiva, la mal llamada “aspiracionista” por el nefasto de López Obrador.

Los “becados o comprados por unos cuantos billetes” recibieron la orden de AMLO de no participar. Aún esos están en un vilo de perder lo más por lo menos; López no puede quitarles los beneficios, solo son balandronadas del delincuente que habita en Palacio Nacional.

No son tiempos de tibiezas, son tiempos de definiciones. Una muestra clara la ha dado el mismo presidente del INE. Lorenzo Córdova, quien ahora es acusado y calificado por el presidente como “pieza clave del grupo conservador”. Así de sucio y cobarde es López Obrador. Lorenzo no pudo más y exhortó a la ciudadanía a defender al INE, pieza clave de la democracia y la libertad electoral; esta institución fundamental para y de los mexicanos.

Desesperado López Obrador, lanza golpes al aire esperando pegarle a cualquiera que se cruce en su camino. Sabe que su reforma constitucional está a punto de reventar. Con el PRI en contra, imposible el cruce de la democracia a la dictadura. Si reacciona y se suma MC, el asunto se le va de las manos al arbitrario. En menos de un mes los diputados federales deberán resolver el desechamiento de la iniciativa, ante la imposibilidad de alcanzar la votación calificada ¡Será a muerte de la iniciativa!

Después vendrá otra embestida de AMLO, Morena y sus aliados. Se irán en contra de las leyes secundarias para desarmar el aparato administrativo del INE, junto con el recorte para el año venidero de más de 4 mil 700 millones de pesos, los que, sumados a este año de 2021, casi llegarán a los 10 mil millones de pesos. Querrán quebrar al INE en su operación y culparlo de la derrota del 2022; lo mismo harán con el TEPJF.

Legó el tiempo d definiciones ¡No a la contrareforma político-electoral de AMLO!

La sociedad unida jamás será vencida. El megalómano del presidente a punto de la esquizofrenia política: será más peligroso.