Puesto; los tres caminos políticos de Ricardo Anaya
Nada ni nadie le puede garantizar a Ricardo Anaya que en cuanto pise el suelo mexicano, pudiera ser detenido cuando todavía no tiene la protección que la ley le otorga ya siendo senador
Ningún político rompe con su historia.
Un manzano puede o no producir su fruto, que podrá ser sano o enfermo, grande o pequeño, pero siempre será manzano.
Así pinta el futuro inmediato para el queretano Ricardo Anaya Cortés.
No podrá cortar su cordón umbilical con su reciente pasado político.
Visto así, es un camino de abrojos rumbo al senado cómo también de mejorales lo fue para el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Y conociendo las partes, el revanchismo se puede dar en cualquier momento.
Nada ni nadie le puede garantizar a Ricardo Anaya que en cuanto pise el suelo mexicano, pudiera ser detenido cuando todavía no tiene la protección que la ley le otorga ya siendo senador.
Ya ve usted como desde el gobierno federal traen a Latinus o al periodista Carlos Loret de Mola.
Así, al queretano le quedan tres rutas políticas.
O cumplir los seis años que le otorga el cargo como senador; ir por la revancha para en el 2030 siendo candidato a la presidencia de la República o bien, en el 27 intentar buscar la candidatura a gobernador de Querétaro.
Por lo pronto, en este 2024 el queretano no llega en el mejor momento que pudiera tener su partido. Arribará cuando, enfrente y pronto – dicen que será en noviembre – se dé un cambio obligado en la presidencia nacional del mismo.
Y ahí podría venir el primer tiro, porque los intereses con Marko ya variaron y no son los mismos del 2018, cuando el actual dirigente del PAN nacional le recomendó poner tierra de por medio para no ser detenido, cuando Ricardo buscó su autoexilio.
¿O en este noviembre podría Ricardo también buscar la dirigencia nacional? Mucho lo dudo, con el desgaste con el que llega.
Además y suponiendo que así fuera, está más que apuntado el senador Damián Zepeda.
Ese pastel no tiene más que una sola rebanada y considero que difícilmente podría ser para el queretano. Quién lo creyera cuando hace solo seis años los tres andaban a partir un piñón.
Si acaso – y si lo dejan – podría buscar la coordinación de los senadores.
Y digo qué si lo dejan, cuando la oposición mayoritaria de Morena en el senado, saben que la fiscalía general de la República puede reactivar el expediente que tiene aún abierto.
La recomendación a Ricardo le llegó por dos vías, tanto por Marko Cortés – cuando su amistad estaba más que firme – cómo por Dante Delgado, líder nacional de Movimiento Ciudadano y que llevaba buena amistad con el queretano.
La investigación al queretano le fue abierta por la fiscalía por los supuestos sobornos recibidos de Odebrecht para sacar adelante la reforma energética de Peña Nieto.
¿Entonces, para que te quedas? Le preguntó Dante, según declaración a posteriori del propio líder naranja.
Y que cree usted que pase. ¿Cree que el gobierno de AMLO, revanchista como es, vaya a perdonar a Ricardo?
¿O bien que Claudia Sheinbaum no meta las manos para nada y tolere su llegada a la candidatura panista a gobernador por Querétaro? La vista de Morena por la gubernatura de Querétaro nadie se la quita.
Para cualesquiera de los tres caminos políticos, al ascenso será sumamente complicado
Andrés González
Periodista de toda la vida, egresado de la escuela Carlos Septién García, catedrático en la Universidad de Guanajuato, analista político en radio y prensa escrita, además de Premio Estatal de Periodismo en el 2000.