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La inminencia del ocaso

Por Fernando Islas - 30/09/2021

Las ideas expresadas en las columnas, así como en otros artículos de opinión, no necesariamente corresponden a la línea editorial de Códice Informativo, y solo son responsabilidad del autor.

El show debe de continuar, probablemente ni el propio Domínguez sepa que le depara el futuro, se presume su llegada a una embajada o en el peor de los casos su regreso al negocio de la ganadería.

 La inminencia del ocaso

Foto: Archivo

El final del sexenio de Francisco Domínguez está a unas cuantas horas de ser una realidad, pareciera ayer que las y los queretanos presenciábamos que el entonces senador con licencia se llevaba el triunfo electoral sobre el ex presidente municipal Roberto Loyola Vera, mismo que contaba con diferentes condiciones que nos hacían pensar que su triunfo estaba asegurado.

Pero justo eso es lo bello de la política, su condición azarosa siempre nos brinda sorpresas a propios y extraños y en el 2015 no fue la excepción, “Pancho” como pide que lo llamen, se llevaba su cuarto triunfo electoral y llegaba a la Casa de la Corregidora con el respaldo de un buen número de votantes y con la sensación de que su habilidad política trascendía las fronteras de del estado y de su propio partido. Hoy se cierra un ciclo que desde el punto de vista oficial fue exitoso en todos los ámbitos, sin embargo y a título personal invito a cada uno de las y los lectores a que hagamos un recuento rápido, puntual y acotado de la administración que está a menos de 24 horas de concluir.

Iniciemos con la ríspida y en ocasiones nula relación con las diferentes representaciones de la clase trabajadora, los suscitado el 1 de mayo de 2016 marcó la postura que tendría la administración estatal con los sindicatos locales, mismos que tuvieron 3 opciones, alinearse y colaborar sin regateos, volverse sedentarios ante la amenaza latente de intervención en su vida interna o resistir ante la indiferencia e incapacidad del entonces secretario del trabajo que no conforme con ser omiso en cuanto a sus labores, se empeñó en desestabilizar diferentes organizaciones con el afán de apoderarse de su funcionamiento desde la parte más orgánica.

Este 1 de mayo que menciono, fue el pretexto perfecto para justificar su intolerancia ante los que disentimos de la versión oficial, para muestra la persecución política de la que hasta la fecha es víctima la Maestra Rosa María Córdova, que no solo fue cesada de forma injustificada de su trabajo, sino que fue perseguida al grado de tener que abandonar Querétaro, hasta que la “normalidad” regresara paulatinamente.

Por otro lado, la relación con la Universidad Autónoma de Querétaro nunca fue cordial, la incongruencia del egresado de la carrera de veterinaria, imperó durante prácticamente toda su administración, condenando de manera infame a la Máxima Casa de Estudios a tener que sobrevivir con un presupuesto injusto e insuficiente, realidad que se mantiene hasta el día de hoy. No conforme con asfixiar financieramente a una de las 8 universidades más importantes del país, desde el núcleo del ejecutivo estatal se emprendieron acciones enfocadas a desestabilizar la vida académica de la UAQ, a través de la injerencia en el proceso electoral de su sindicato de académicos (SUPAUAQ) en el año 2016. Sumado a lo ya mencionado en este párrafo, en este sexenio la comunidad docente y estudiantil encabezada por el Dr. Gilberto Herrera, tuvo que salir a las calles a defender la autonomía de nuestra Alma Mater, ante diferentes actos que vulneraban la vida interna de la universidad.

Cierro esta colaboración señalando la negativa constante que mostró la administración saliente ante el respeto y reconocimiento de diferentes derechos humanos que hasta el día de hoy son negados para las y los queretanos. Francisco Domínguez se va con el sinsabor de no poder participar en las elecciones internas de Acción Nacional, simple y sencillamente porque otro queretano puso especial empeño en aceitar su maquinaria al interior del partido blanquiazul.

Pero apreciable público, el show debe de continuar, probablemente ni el propio Domínguez sepa que le depara el futuro, se presume su llegada a una embajada o en el peor de los casos su regreso al negocio de la ganadería. De manera paralela su delfín, Mauricio Kuri llega con una agenda plagada de pendientes en materia social. Tiempo al tiempo.

Fernando Islas


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