Inteligencia Artificial: Oportunidad para crear riqueza lejos de la singularidad
La singularidad tecnológica está lejos de suceder. Las tecnologías de inteligencia artificial que hemos logrado crear son muy poderosas, pero para realizar tareas de propósito específico.
Autor: Dr. Julio Noriega Velásco
Decano Regional de la Escuela de Ingeniería y Ciencias
La reciente aparición de aplicaciones de Inteligencia Artificial (IA) como ChatGPT, DALL-E, Lensa AI, entre otras, ha traído nuevamente a la conversación pública reflexiones de oportunidad e incertidumbre.
Mientras hay quienes sienten inseguridad por la llegada de la singularidad tecnológica – con la idea de que los humanos serán superados por máquinas artificialmente inteligentes- hay quienes apuestan con toda su energía y recursos por transformar radicalmente sus productos y servicios, para liderar en sus sectores y tener un impacto positivo en la sociedad. Actualmente ya existen diversas iniciativas de compañías líderes en sus industrias para desplegar IA responsablemente.
Sin embargo, la singularidad tecnológica está lejos de suceder. Las tecnologías de inteligencia artificial que hemos logrado crear son muy poderosas, pero para realizar tareas de propósito específico. Hay un abismo aún para imaginar la integración de un sistema cognitivo que tome decisiones y ejecute acciones de orden múltiple que incluya su autogeneración de forma autónoma.
Por ejemplo, la capacidad de ChatGPT se enfoca en estructurar respuestas a partir de reproducir e integrar patrones de texto de innumerables fuentes como resultado de patrones de texto iniciales, integrando a su repertorio de fuentes de texto cada nueva interacción con su usuario. Es una tecnología que pareciera razonar, aprender, planear y tomar decisiones, con rasgos de inteligencia humana, pero no deja de ser un programa computacional y algoritmo basado en modelos de lenguaje de gran escala que ejemplifica una sorprendente tecnología disruptiva en el campo de la IA.
La IA es una tecnología poderosa y de aplicaciones sorprendentes. Debemos aprenderla y aprovecharla con creatividad para crear riqueza, nuevas tecnologías y empresas. El Foro Económico Mundial estima para el 2030 un valor del mercado de esta industria de $1600 billones de dólares.
Podemos construir innovación tecnológica basada en IA para diversos sectores: Salud, Movilidad, Logística, Comercio, Agricultura, Manufactura, Energía, Desarrollo de Alimentos y Materiales, Finanzas, Cuidado del Ambiente, Seguridad, entre muchos otros.
No podemos ser espectadores y esperar que nuevas soluciones y productos tecnológicos de IA vengan de otras regiones del mundo. En Querétaro, debemos apoyar y orientar a nuestras ingenieras, ingenieros e innovadores a utilizar estas nuevas tecnologías responsablemente, y construir muchas historias de éxito en emprendimiento tecnológico que posicionen a Querétaro como un ecosistema de innovación de clase mundial.