Tercer informe de Marcos, una despedida entre las sombras
El cuarentón edil carga sus baterías para su próximo cargo como diputado federal por la vía plurinominal, una figura que en su momento criticó y calificó como diseñada para personas mayores de 40 años

Foto: Archivo
El informe de actividades del alcalde de Querétaro, Marcos Aguilar Vega, constituyó en sus tres años de gobierno lo mismo una oportunidad inmejorable para posicionar su imagen, como un escaparate para “cerrar la puerta” de Centro Cívico de forma discreta, sin tanto ruido.
Luego de ganar la elección de 2015 de forma inobjetable, Aguilar Vega comenzó a trabajar y visitar todos los rincones del municipio de Queretaro, pues -como el propio edil lo dijo en múltiples ocasiones- no venía “a calentar la silla”.
Sin embargo, las obras y acciones comenzaron a disgustar a la población y a la clase política opositora, que se cansó de criticar al alcalde Aguilar Vega en casos como la concesión del servicio de recolección de basura, el despido de trabajadores municipales e incluso el retiro de vendedores ambulantes de la histórica Alameda Hidalgo.
El primer mensaje a la ciudadanía en julio de 2016 fue la oportunidad de oro para que el alcalde se defendiera de esos ataques y la respuesta de la gente fue total, pues se registró un lleno en el Querétaro Centro de Congresos.
“Se han tomado decisiones drásticas e inesperadas, pero con la finalidad de buscar el bien común y lograr las metas propuestas”, aseguró en ese momento el edil capitalino.
El segundo mensaje de Aguilar Vega a la población también fue en el Querétaro Centro de Congresos, también con un lleno total, pero ya con un disgusto social evidente por acciones como las ciclovías y las aparentemente fallidas obras pluviales, que no estuvieron a la altura de las circunstancias, pues la ciudad se volvió a inundar en temporada de lluvias.
Adicionalmente, el descontento social se acentuó por los índices delictivos al alza, lo que aprovechó la oposición para criticar la gestión de Aguilar Vega.
En esa ocasión, su mensaje fue contundente: “no tomamos decisiones pensando en el costo político ni en los próximos comicios, sino en el futuro de la capital”.
Cabe recordar que ambos mensajes ciudadanos se llevaron a cabo luego de que el alcalde entregó por escrito el informe de actividades al Cabildo, que por ley debe cumplir.
Para este año, específicamente el 31 de julio, Aguilar Vega solo hará entrega del informe de actividades al Cabildo, no habrá encuentro con la ciudadanía, bajo el argumento de la austeridad.
Era el momento preciso para que el edil apuntalara su imagen al cierre de su administración municipal, pero la decisión fue otra: ajustarse a las políticas de austeridad y eliminar el mensaje ciudadano, que en los dos años anteriores se hizo un gasto de algunos millones de pesos para el lucimiento personal de Aguilar Vega.
Ciertamente, en sus mensajes ciudadanos de 2016 y 2017 -ambos en un repleto Querétaro Centro de Congresos- Marcos Aguilar Vega lució impecable y dio cátedra de oratoria.
También dio muestra de su gran conocimiento del municipio de Querétaro, así como de los problemas que aquejan a esta ciudad y los retos por delante. Dio cifras, estadísticas y numeralias puntuales del municipio que aún gobierna.
“No hay ningún temor al rechazo, yo me siento contento, me siento satisfecho, estoy tranquilo con las decisiones que se tomaron”, dijo al final de su encuentro ciudadano de 2017.
Marcos Aguilar Vega entregará esta noche al Cabildo su informe sobre el estado que guarda la administración municipal en el último año y en los próximos días, quizás mañana mismo, solicite licencia definitiva al cargo de alcalde.
El cuarentón edil carga sus baterías para su próximo cargo como diputado federal por la vía plurinominal, una figura que en su momento criticó y calificó como diseñada para personas mayores de 40 años.