10 consejos para sacarle todo el provecho al próximo “El Buen Fin”
Los meses sin intereses no son descuento, cuidado con los viajes de vacaciones, el mundo del e-commerce, y otros consejos para disfrutar y no sufrir el fin de semana más barato del año
Por séptimo año consecutivo, México celebrará el próximo fin de semana una edición de “El Buen Fin”, la versión local del famoso “Black Friday” de los Estados Unidos y que básicamente consiste en ofrecer descuentos y promociones especiales para animar a los consumidores a adquirir productos y servicios.
La experiencia que ofrece “El Buen Fin” ha ido mejorando año con año, y aunque dista mucho parecerse aún al viernes negro norteamericano, el consumidor mexicano cada vez se vuelve más exigente y cuidadoso, lo que motiva a los ofertadores de productos y servicios a ser más responsables, atrevidos y creativos en cada edición nueva.
Para volverse un “experto” comprando en “El Buen Fin”, vale la pena tomar en cuenta los siguientes consejos, que no solo ayudarán a nuestra economía familiar, sino también a la economía de tu ciudad y mejorará paulatinamente este ejercicio que ha llegado para quedarse.
1.- Revisa antes lo que quieres consumir para poder comparar:
Ese esencial que si ya sabes lo que quieres o necesitas, acudas a las tiendas de tu preferencia desde ahorita y cheques sus precios normales. Tómale fotos a las etiquetas y, ya en “El Buen Fin” confirma que el precio sea menor si es que te están ofreciendo un supuesto descuento.
Esto es importante porque te aseguras de hacer una compra realmente conveniente, y porque si alguna empresa pretende pasarse de lista, puedes denunciarla ante la Profeco. No dejes de hacerlo, pues entre todos podemos ayudar a que “El Buen Fin” realmente ofrezca beneficios y no sea solo un ardid publicitario. Hay mecanismos para castigar a las empresas que quieren engañar a sus consumidores.
2.- Revisa la herramienta “Quién es quién en los precios” de Profeco:
Esta herramienta nos genera un comparativo accesible, rápido y confiable de más de 2 mil productos para saber qué proveedor ofrece mejores precios, y sin tener que salir de casa.
Es muy útil pues en pocos minutos podemos tener referencias claras de a dónde ir si quieres un producto o servicio específico. Así ahorrarás tiempo pues no tendrás que dar vueltas en distintas tiendas y hasta ahorrarás gastos de traslado.
3.- Divide lo que deseas y lo que necesitas:
Es muy común confundir estos dos rubros, sobre todo cuando se realizan compras emocionales. Pero es esencial tener claro qué necesitas, porque te hace falta, y qué deseas, porque simplemente lo quieres.
No está mal desear algo y darse la oportunidad de vivir el capricho. Lo que está mal es darle prioridad a eso, gastarte el dinero, y no tener más para cubrir lo que necesitas.
Lo bueno de “El Buen Fin” es que hay descuentos en todo. Si un baño de tu casa está dañado, pasa agua y te hace gastar de más en su consumo, seguramente lo tienes que cambiar y encontrarás una buena oferta en alguna tienda para el hogar. Si tienes recursos limitados es mejor que inviertas en eso en lugar del nuevo celular que tanto deseas, por más que esté en descuento.
4.- Meses sin intereses no es sinónimo de descuento:
No te dejes engañar. Hay mil y un maneras de acceder al beneficio de los meses sin intereses. Muchas tarjetas de crédito ofrecen este beneficio en compras mínimas a pesar de que la tienda no lo ofrezca, y las tiendas están ofreciendo este esquema de pagos en momentos durante todo el año.
“El Buen Fin” es, según su publicidad, el fin de semana más barato del año. Lo que debes buscar es descuentos reales en los precios finales, porque esquemas de pago encuentras siempre. Vale más la pena dejar ese gasto para después y aprovechar en el momento lo que sí te dé un beneficio. Es muy probable que en navidad, otra época comercial importante, te ofrezcan los mismos planes de meses sin intereses.
5.- Y si le entras, no te vuelvas loco con los meses sin intereses:
Los meses sin intereses son un esquema de pago, nada más. Son muy útiles, pero en líneas generales, vas a gastar lo mismo. Tu economía se verá igualmente afectada, así que sé responsable.
Los pagos mensuales se vuelven parte de tus gastos fijos por tres, seis, 12, 18, 24 o tantos meses como sea necesario, así que en cuenta el acumulado. Si empiezas a juntar varios pagos, se vuelven un gasto fijo que afectará tus cuentas. Eventualmente, entre más meses sin intereses estés pagando, tendrás que dejar de comprar nuevos productos o servicios hasta pagar los que ya tienes.
Si pierdes el control sobre esto puedes afectar seriamente tu economía y meterte en graves problemas financieros. Piensa en toda la vida del crédito, y no solo en los dos o tres primeros meses.
6.- Revisa diversos proveedores y escoge la mejor opción:
Si en una tienda te ofrecen un 20 por ciento de descuento, tal vez en la de enfrente la oferta es del 25 por ciento. La primera se veía atractiva, pero la segunda lo es más. En “El Buen Fin”, como en cualquier época del año, debes ser inteligente al momento de comprar y olvidarte del consumo emocional.
Sé frío y calculador, por más ganas que tengas de comprarte unos zapatos nuevos, las opciones son tan variadas que sería poco inteligente no ir a revisar otras. Vale la pena esperar y no irte nunca por la primera alternativa.
7.- El e-commerce es lo de hoy, no lo olvides:
Aunque estamos acostumbrados a ir a tiendas físicas, y poder ver y tocar lo que vamos a comprar, es un hecho incontrovertible que la mejor opción hoy en día es el comercio en línea.
En México está en plena explosión, y por ello muchas tiendas y marcas están invirtiendo mucho en sus servicios en línea, y para atraer clientes, ofrecen grandes descuentos en cualquier época del año.
En “El Buen Fin”, además del descuento regular que ofrecen, incluirán los descuentos especiales por la fecha, por lo que el beneficio a tu bolsillo puede ser enorme.
Si nunca has probado el comercio en línea, confía en él. Es muy seguro y aunque no estamos exentos a algún problema, no son más de los que podrías enfrentar comprando de manera tradicional un producto con defectos de fábrica, por ejemplo.
Además de los servicios premium, como Amazon y Alibaba, que son maravillosos, hay opciones con descuentos como Groupon o Privalia, y las tiendas departamentales ya tienen sus propias plataformas. Revisa la de Wall Mart y El Palacio de Hierro, por poner un par de ejemplos, donde el mismo producto que ves en el aparador de la tienda tiene descuentos regulares de entre el 15 y el 20 por ciento en todo el año.
8.- Cuidado con las compras de vacaciones y tiempos compartidos:
Nada puede tanto con nuestras emociones como la idea de estar acostados en un camastro frente al mar con un buen trago en la mano. Los vendedores de paquetes vacacionales y tiempos compartidos son expertos en hacerte sentir especial, y en momentos como “El Buen Fin” ofrecen grandes ofertas que suenan irrechazables.
Este tipo de negocios tienen tasas de cancelación altas que ayudan a matizar el descuento que ofrecen. Es decir, si 10 personas les compran un paquete, la mitad probablemente nunca lo utilicen y entonces el dinero que pagaron se vuelve utilidad pura.
¿Por qué pasa esto? Porque la gente suele dejarse llevar por sus emociones y no toma en cuenta todo lo que rodea a una compra como esta. ¿Puedo yo tomarme vacaciones para aprovechar este paquete? ¿Tengo para pagar la transportación que implica llegar a ese destino? ¿De verdad voy a poder ir?
La recomendación es la misma. Piensa antes de actuar, no te dejes llevar por la publicidad y las líneas de ventas. Si todas las condiciones te lo permiten, seguro tendrás unas maravillosas vacaciones a un precio asequible. Pero si no, engrosarás el porcentaje de cancelaciones de personas que compran, no pueden usar, dejan perder y generan negocio para esa industria.
9- No olvides la economía local:
No todo son grandes marcas globales y productos estrella a nivel internacional. “El Buen Fin” pretende activar la economía, y los restaurantes o los proveedores de productos y servicios de tu ciudad también le entran. Reserva algo para poder consumir local. Generarás un círculo virtuoso que te beneficia. Un restaurante local que funciona y crece necesita proveedores locales a los que eventualmente les comprará más volumen, y ese proveedor a su vez necesita de otros, y así sucesivamente. En esa línea seguro entra tu ámbito de negocio.
Consumir productos y servicios es algo inevitable. De una forma u otra nuestro dinero terminará dando vueltas en el sistema financiero y pasará a ser el dinero de alguien más. Pero que sea inevitable no quiere decir que no pueda hacerse de forma estratégica. Piensa en el efecto que tiene cada peso que gastas.
10.- No hipoteques tu futuro:
En líneas generales, comprar de manera consiente en “El Buen Fin” es lo mismo que hacerlo en cualquier fecha del año. No pierdas la cabeza por los descuentos, por más atractivos que estos sean. Considera el impacto que tendrá en tu economía adquirir ese producto o servicio y toma una decisión responsable.
Sin ánimo de ser dramático, una mala decisión motivada por el afán de tener que comprar durante “El Buen Fin” puede ser muy dañina para tu economía incluso durante años. Si usas una tarjeta de crédito pero no tienes la liquidez para pagarla a tiempo y cancelar los intereses esto puede hacer crecer la deuda de manera exponencial hasta llegar a un punto en el que se vuelve insostenible.
El banco te cobra, no puedes pagar y para liquidar la deuda te ofrecen un plan de pago mínimo con la condición de inscribirte como moroso en el buró de crédito por los próximos siete años. Pasa todo el tiempo.