Querétaro avanza en vacunación contra la influenza con 434 mil 969 dosis aplicadas
En lo que va de la temporada, se han registrado tres defunciones: un hombre de 52 años en El Marqués, y una mujer de 83 y un hombre de 85 años en Querétaro, ninguno de ellos con antecedentes de vacunación
La Secretaría de Salud del estado de Querétaro (SESA) ha aplicado hasta el momento 434,969 dosis de la vacuna contra la influenza, lo que representa un avance del 70.21% de la meta estatal de 619,499 dosis.
Hasta el 30 de enero, se han registrado 320 casos positivos de influenza estacional en la entidad, con 179 mujeres y 141 hombres afectados, cuyas edades oscilan entre un mes y 96 años. Los casos se distribuyen en varios municipios, siendo Querétaro el que presenta el mayor número con 235 casos.
En lo que va de la temporada, se han registrado tres defunciones: un hombre de 52 años en El Marqués, y una mujer de 83 y un hombre de 85 años en Querétaro, ninguno de ellos con antecedentes de vacunación.
A nivel nacional, al 27 de enero, se han reportado 4,680 casos positivos y 56 defunciones por influenza, distribuidas en varios estados del país.
Durante la temporada de frío, el riesgo de infecciones respiratorias agudas, incluida la influenza, aumenta. Por ello, se exhorta a los grupos de riesgo, como personas de entre seis a 59 meses de edad, mayores de 60 años, embarazadas, personal de salud y personas con enfermedades crónicas, a vacunarse para evitar complicaciones.
La influenza estacional se caracteriza por fiebre alta, tos seca, dolores musculares y articulares, dolor de cabeza y garganta, malestar general y secreción nasal abundante. En personas con enfermedades crónicas, la influenza puede causar enfermedad grave e incluso la muerte.
La vacuna contra la influenza se aplica en los 198 centros de salud de los 18 municipios del estado, así como en un puesto de vacunación en Plaza de Armas y en las Unidades Médicas Familiares del IMSS.
La Secretaría de Salud recomienda vacunarse, usar cubrebocas si se está enfermo, evitar cambios bruscos de temperatura, abrigarse, lavarse las manos frecuentemente, ventilar habitaciones, desinfectar superficies de contacto común, cubrirse al toser o estornudar, consumir alimentos ricos en vitaminas A y C, aumentar la ingesta de líquidos, evitar exponerse a lugares fríos y acudir al médico en caso de presentar síntomas.