Se lleva acabo la primera cirugía ganglio centinela en Querétaro

La cirugía tiene como objetivo retirar tumores malignos en mamas, sin afectar los ganglios axilares. A través de un proceso por el cual se asegura que la enfermedad no se ha extendido a la región axilar, se logra evitar un sobre tratamiento de la pacientes.

El médico oncólogo, José Luis Flores Arenas fue quien se encargó de llevar a cabo esta primera gran cirugía en la entidad, con el apoyo de José Francisco Gallegos Hernández, el primer médico en publicar sobre esta técnica en el país.

El doctor José Luis Flores señaló que la cirugía se ha practicado con anterioridad en el estado pero no en su totalidad, pues en la mayoría de las ocasiones había sido necesario que la paciente fuera a la Ciudad de México a realizar sus pruebas de medicina nuclear. En esta ocasión el procedimiento fue llevado en su totalidad en el Hospital Oncológico Infantil del Estado de Querétaro.

“Anteriormente cuando una paciente tenía un cáncer de mama de cualquier tamaño nosotros los oncólogos estábamos obligados a quitar todos los ganglios de la región axilar” explicó el especialista.

Sin embargo a través de está técnica, la cual solo es aplicable a mujeres cuyos tumores estén en etapas muy tempranas. En ese sentido el doctor reiteró que es de suma importancia la detección oportuna a través del monitoreo constante.

“Esos tumores (muy pequeños) no afectan los ganglios a nivel axilar, si no tiene ganglios palpables, se envían a hacer un ultrasonidos para descartar la enfermedad en la zona. Para detectarlo se requiere de dos métodos uno es mediante medicina nuclear, que un día antes de la cirugía” detalló .

En este proceso se aplica alrededor de la areola un radiocoloide, una sustancia que viaja al ganglio centinela y corroborar en qué nivel está el ganglio a nivel axilar.

Posteriormente, durante la cirugía “nosotros como cirujanos oncólogos ya en la operación introducíamos un azul colorante” con lo que se permite delimitar al ganglio centinela para retirar una muestra que es enviada al patólogo y que durante la intervención determina si existen o no células cancerígenas en la región.

“Se quita y se manda analizar con el patólogo y si el patólogo nos dice que no está contaminado ya ni hay necesidad de quitar todos los ganglios, durante la cirugía para no sobre tratar al paciente evita cirugías innecesarias” subrayó el especialista.

La cirugía es completamente segura y garantiza a la paciente una mejor recuperación al evitar retirar más ganglios, lo cual puede llegar a producir edemas en la región axilar y alentar el proceso de recuperación.