UAQ propone seis sedes como centros de vacunación antiCOVID-19
Dichos espacios están ubicados en Centro Universitario y los campus Juriquilla, Aeropuerto, Corregidora, Jalpan de Serra y San Juan del Río
La Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) ofreció seis espacios universitarios para ser utilizados como centros de vacunación anti-SARS CoV2, informó la rectora Teresa García Gasca, esto como parte de la Estrategia Nacional de Vacunación para combatir la enfermedad de COVID-19.
Dichos espacios están ubicados en Centro Universitario y los campus Juriquilla, Aeropuerto, Corregidora, Jalpan de Serra y San Juan del Río. Dichos lugares deberán ser supervisados por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), dependencia encargada de verificar e informar si cumplen con los requerimientos para ser centros de vacunación.
García Gasca aseguró que, ante cualquier duda, se puede llamar al 442 192 1200, ext. 3508, con Guadalupe Perea Ortiz, secretaria de vinculación y servicios universitarios; sin embargo, dijo que aún se desconoce, con precisión, qué día arrancará la vacunación y qué vacuna se aplicará.
“Parece ser que es el 15 de febrero, tampoco sabemos con precisión qué vacuna vamos a aplicar, estamos en espera de esa información”, indicó.
Durante su participación en el noticiero Presencia Universitaria, transmitido por TvUAQ y Radio Universidad (89.5 FM), detalló que 313 alumnos de las facultades de Medicina, Enfermería (FEn), Ciencias Naturales (FCN), Química (FQ) e Ingeniería (FI) respondieron a la convocatoria para unirse como voluntarios a las brigadas de vacunación anti-SARS CoV2, los cuales serán organizados por la delegación de la Secretaría de Bienestar, junto con las y los brigadistas de otras instituciones.
La rectora mencionó que el viernes inició la primera capacitación oficial por parte de las autoridades federales, mientras que la Facultad de Enfermería también ofrecerá un curso que incluye temas relacionados a la vacunación como tipos de vacunas, tiempos de espera, forma de aplicación, respuesta ante efectos adversos, entre otros.
“Es un requisito que todas las personas que participen como voluntarios en las brigadas reciban la vacuna, la intención no es que por eso sean brigadistas, queremos que sea un espíritu de servicio, pero desde luego que es una responsabilidad proteger a los propios brigadistas y sería ilógico pensar que nos está vacunando alguien que no está protegido”, puntualizó.
Sobre el desarrollo de la vacuna contra COVID-19 de la UAQ, la académica aclaró que es segura e inmunogénica de acuerdo con las pruebas realizadas en animales experimentales de granja, tales como cabras, ovejas, cerdos y conejos, por lo que el siguiente paso será llevar a cabo ensayos de respuesta inmunocelular en ratones y ensayos de neutralización viral con una vacuna de alta pureza para probar su eficacia y, con ello, contar con la aprobación de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) para transitar a las fase I y II en seres humanos.
La universidad ha aportado cerca de un millón de pesos al proyecto de la vacuna, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) 3.3 millones de pesos y 2.8 millones de pesos fueron conjuntados por eventos, donativos de la sociedad y aportaciones de empresas que han permitido hacer trabajos de laboratorio, con lo que se reúne lo necesario para licitar un cromatógrafo de líquidos de alta velocidad para producir la vacuna de alta pureza.
“Estamos en el camino, la única diferencia entre nosotros y las vacunas extranjeras es que en estas últimas hay presupuesto y tienen forma de salir adelante, pero lo vamos a lograr”, aseguró.
En cuanto al Semáforo Universitario por Contingencia Sanitaria de la UAQ, García Gasca señaló que la actividad en la institución se mantiene restringida al máximo solo con actividades esenciales administrativas y de investigación, debido a que casi la totalidad de los municipios de Querétaro se encuentran en rojo, a excepción de Peñamiller, Amealco y Huimilpan que están en naranja.
Por lo anterior, pidió a la población reflexionar sobre el papel de la sociedad ante el alza de casos de COVID-19, pues aunque reconoció que las decisiones de las autoridades no han sido las mejores, afirmó que la ciudadanía debe ser solidaria y responsable.