“Hay que evitar que el Centro Histórico de Querétaro se convierta en un antro permanente”: Cronista municipal
Andrés Garrido Del Toral, cronista de la capital, expresó que debe haber un equilibrio entre el uso comercial y habitacional en esta zona
A 36 años del nombramiento a Querétaro como Zona de Monumentos Históricos, el cronista de la ciudad, Andrés Garrido Del Toral, expresó que debe haber un equilibrio en el centro histórico para evitar que se convierta en un “antro permanente” o en un museo.
En entrevista, el cronista expresó que el hecho de que se tenga tal periodo de tiempo conservando la denominación es muestra de la coordinación entre los tres niveles de gobierno, sin embargo, dijo que se tiene que trabajar en un reordenamiento habitacional y comercial en el primer cuadro de la capital.
“Y el Centro Histórico requiere de reordenamiento en la cuestión comercial y de espectáculos. No podemos convertir al centro histórico en un antro gigantesco, que sea un centro vivo pero también habitacional, están huyendo muchos habitantes desde hace mucho tiempo porque ya no soportan los antros, es una problemática pero a la vez no lo podemos convertir en museo, una ciudad de momias, hay que encontrar el equilibrio“.
El cronista expresó que parte de los retos que enfrenta el centro histórico, es el bandolerismo que daña las estructuras, aunado también al abandono de muchos inmuebles, de los cuales sus habitantes no tienen recursos para invertir, y ante el hecho de que el INAH no cuenta con recursos para restaurar dichas casas, es que se va perdiendo en el deterioro.
“Precariedad economica, los servicios públicos están bien, creo que es una capital de 10 Querétaro, estamos experimentando con la basura, el INAH y la UNESCO nos vigilan con lupa y está bien, un municipio que se dice culto, que se dice inteligente actúa coordinado con ellos, veo la necesidad de un reordenamiento urbano en el Querétaro centro histórico, en el Querétaro habitacional e industrial“.
El pasado 30 de marzo el municipio cumplió 36 años bajo esta denominación, durante el mandato del entonces gobernador Rafael Camacho Guzmán.