El semanario Charlie Hebdo ya había sido atacado en 2011; hacía sátira sobre las religiones
Aquí siete portadas del Charlie Hebdo en la que se refirió a distintas religiones
En noviembre de 2011, la sede el semanario satírico Charlie Hebdo –que fue atacado este miércoles con un saldo de 12 muertos- fue agredido con un cóctel molotov que provocó un incendio y dejó las instalaciones inutilizables, según reportes de la prensa española.
En aquél entonces el asalto estaba vinculado al número publicado el 2 de noviembre y dedicado al avance islamista en Túnez y Libia en cuya portada apareció un dibujo del profeta Mahoma, nombrado “redactor jefe” del número.
En aquella ocasión el primer ministro, François Fillon, expresó su “indignación” por el atentado, que fue condenado por el conjunto de la clase política y de los medios franceses.
La portada, que ya había provocado cierto revuelo en las redes sociales, retrató al profeta, sonriente, prometiendo “100 latigazos a quienes no se mueran de risa”. El número tenía como objetivo “celebrar la victoria” del partido islamista Ennahda en Túnez y el anuncio por parte del Consejo Nacional de Transición libio de que la sharía sería la principal fuente de la nueva Constitución del país.
Los 75 mil ejemplares se agotaron en apenas unas horas. Algunos quiosqueros, sin embargo, se habían negado a distribuirlo por miedo a las represalias.
“En Twitter, en Facebook, hemos recibido muchas cartas de protesta, de amenazas y de insultos“, aseguró el director de la publicación, el dibujante Stéphane Charbonnier, Charb, para quien no había duda de que el ataque era obra del integrismo musulmán. Charb murió este miércoles 7 de enero en un ataque a la sede del medio.
La revista ya había recibido amenazas parecidas en 2006, cuando reprodujo las caricaturas de Mahoma publicadas por el diario danés Jyllands-Posten, en defensa de la libertad de expresión, acompañadas por retratos de varios de sus dibujantes. Al año siguiente, la publicación fue a juicio, demandada por varias organizaciones islámicas, y fue absuelta al considerarse que las caricaturas no atacaban al islam, sino a los integristas.
El Consejo Nacional del Culto Musulmán recordó, en esa fecha, que hacer una caricatura del profeta “es considerado como una ofensa por los musulmanes”.
El periódico español El Diario recopiló siete portadas en las que la revista había hecho sátira sobre varias religiones que presentamos a continuación:





