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A contracorriente: ser joven, universitaria y no identificarse con el feminismo

Por Raúl Mendoza Bustamante - 08/03/2023

Aunque Sofía coincide con los objetivos de equidad del movimiento, no coincide en las formas o prácticas del feminismo

 A contracorriente: ser joven, universitaria y no identificarse con el feminismo

Aunque en México no hay datos estadísticos oficiales sobre el número de personas que se sienten identificadas con el feminismo, la experiencia empírica revela que aún existen personas que no comulgan, ya sea de manera parcial o total con los planteamientos de este movimiento.

En el marco del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, me he dado a la tarea de buscar a una joven universitaria que no se identifique con esta lucha a fin de conocer una perspectiva distinta, sin embargo, la búsqueda no ha sido sencilla.

Y es que el feminismo tiene un componente sustancial de mujeres jóvenes y con educación superior, como así lo han demostrado las movilizaciones realizadas en los últimos años en distintas partes del país. En Querétaro el caso ha sido similar, pues estudiantes de la Universidad Autónoma (UAQ) y del Instituto Tecnológico de Querétaro (ITQ) han sido, en gran medida, uno de los componentes principales de las movilizaciones.

No obstante, aún hay voces disidentes que no concuerdan, en alguna medida, con el movimiento feminista. Es el caso de Sofía Maya Esquivias, una joven de 25 años quien actualmente cursa el octavo semestre de la licenciatura en derecho de la UAQ.

Sofía explica que coincide en las motivaciones del movimiento como la equidad, pero difiere en las formas, sobre todo, de aquellas mujeres que se encuentran en el espectro del feminismo radical:

“A lo mejor piensan o creen muchas, sobre todo las que son o se hacen llamar como radicales, que creen que su opinión es la única válida, y no aceptan opiniones contrarias. Y yo creo que para llegar a un consenso deben existir opiniones encontradas, para llegar a un punto en el que se pueda trabajar”, explica.

Sofía añade que en muchas ocasiones las mujeres esperan un trato diferenciado por el simple hecho de ser mujeres: “No por ser mujer significa que siempre vamos a tener la razón, van a estar las cosas a nuestro favor, en ese sentido, la justicia la ven subjetiva”.

Respecto a cómo es tener una postura distinta a la que tiene la mayoría en su escuela, Esquivel Maya explica que, afortunadamente, en la universidad ha encontrado tolerancia a la discusión de ideas, sin embargo, muchas personas creen que tener una opinión distinta significa estar en contra.

Como todo es tan radical, tan polarizado, no se llega a un consenso a una opinión objetiva y crítica, y se cree que, por opinar diferente, estás en contra de ellas cuando no es la realidad, o sea, simplemente, se piensa diferente, se lucha diferente y se hacen diferentes las cosas de acuerdo al contexto social en la que una se desarrolle o que una viva”, asegura.

Sobre todo, porque está de acuerdo en que se luche por los derechos, pero no en la “forma radical como lo quieren hacer: “estoy de acuerdo que las revoluciones no se hicieron hablando o platicando, pero yo creo que ya no estamos en esa época, ni en el mismo contexto”.

Sofía recuerda que el primer acercamiento con el feminismo lo tuvo en el segundo semestre de su carrera, de la mano de una de sus maestras: “lo bueno de ella es que se prestaba a escuchar, no era radical, vaya, no se cerraba a su idea de lo que ella decía era ley y nadie más podía opinar diferente. Yo creo que nos hizo pensar y ver las dos perspectivas, nos hizo tener criterio al respecto”.

Finalmente, Sofía señala que la sororidad, en muchas ocasiones, es una postura hipócrita: “Yo creo que la sororidad, muchas veces, es una sororidad hipócrita en donde solo seleccionamos a qué mujeres sí vamos a defender y qué mujeres no vamos a defender. Las que piensen diferente no las defendemos, las que sí estén de nuestro lado las defendemos, es eso, más o menos, lo que hacen algunas. Yo creo que si estuviera un poco más consciente o más con los pies en la tierra de muchas mujeres, sería una excelente lucha…”.


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