Además del conflicto en el Corregidora ¿Qué otras crisis en Querétaro han trascendido a nivel nacional?
De la golpiza a los emos a los zafarranchos en conciertos de la feria, Querétaro tiene su historial de conflictos violentos
Los acontecimientos que tuvieron lugar el pasado 5 de marzo en el Estadio Corregidora causaron una profunda conmoción en la sociedad queretana. El fantasma de la posible desaparición del equipo, así como las responsabilidades que se fincaron contra funcionarios y empresas de seguridad pública, aún penden sobre la ciudad de Querétaro, constituyendo los hechos del pasado sábado en uno de los mayores conflictos políticos que ha vivido la capital del estado.
Sin embargo, esta no es la primera ocasión en que se registra un conflicto de esta magnitud, mucho menos, la primera vez que un acontecimiento violento se traduce en un “terremoto político“. Entre las crisis que han cimbrado a la política local durante los últimos años, hay sucesos policiacos, tragedias, y zafarranchos políticos de relevancia. Estos son algunos de los más destacados.
Marzo de 2008: No se sabe con exactitud cómo empezó todo, pero durante un par de semanas circularon entre las preparatorias, tanto públicas como de paga, invitaciones, sobre todo a los hombres, para congregarse en Plaza de Armas y dar un escarmiento a los “emos“. Lo que al principio era un rumor puso a Querétaro en la escena nacional cuando un aproximado de 800 jóvenes pertenecientes a tribus urbanas, hicieron caso a la invitación y atacaron a los “emos” en plano corazón de la capital del estado. Al final se tuvo un saldo de 22 detenidos, todos ellos menores de edad, sin que se registraran víctimas mortales.
En este suceso se condenó la poca tolerancia e incluso discriminación por parte del grupo de jóvenes “contrario” a los emos; el hecho fue noticia a nivel nacional, y se evidenció el poderío de las redes sociales para generar odio, mientras que en los videos, que circularon en noticiarios de todo el país, se apreciaron a detalle las agresiones.
El siguiente acontecimiento de esa magnitud ocurrió en 2012. Un concierto, denominado Music Fest terminó en trifulca, con saldo nueve personas detenidas y una mujer violada, en ese suceso volaron piedras. Los lesionados fueron 200, y quedó en evidencia la poca coordinación de las corporaciones de seguridad pública y privada.
El grupo Plastilina Mosh se presentaba en el escenario del Ecocentro, cuando comenzó una campal por el consumo excesivo de bebidas alcohólicas. Ahi se informó que la Unidad de Protección Civil no había sido notificada del evento, por lo que no se hizo una verificación adecuada del inmueble, además hubo lesionados con arma blanca y un vehículo incendiado.
En 2014 hubo otro concierto que también terminó en tragedia, esto durante la Feria Internacional Ganadera, cuando se desencadenó una batalla campal durante la presentación de la Banda MS.
En ese momento había más de 50 mil personas en el Ecocentro, 10 mil más en el Estadio Municipal, viendo a Juan Gabriel y 4 mil más que intentaban entrar al palenque de Querétaro para ver el show de Maria José.
Durante la trifulca, una mujer falleció por un infarto debido a la impresión de ver la cantidad de personas que estaban peleando, al grado de romper la malla ciclónica y apedrear unidades de transporte.
Otro suceso llegó a los titulares internacionales en 2015, se trata del caso de Daphne Mc Pherson quien tuvo un aborto espontáneo mientras laboraba en Liverpool de San Juan del Río y la cual fue encarcelada debido a no contar con una regulación adecuada en un marco jurídico por este tema, esto abrió un debate que dividió opiniones entre los que estaban a favor y en contra del aborto.
En 2016, fue un brutal feminicidio lo que acaparó los titulares. El cuerpo de Yosheline Arenas fue localizado el 18 de enero en Saldarriaga, y se determinó que un hombre, que fue identificado como su amigo, la había asesinado luego de una sesión fotográfica, fracturándole de forma accidental la quinta cervical y provocándole la asfixia. El joven quiso ocultar sus restos y abandonó el cuerpo en Saldarriaga, provocando que los medios de comunicación y autoridades se volcaran en su búsqueda, hoy el imputado se encuentra pagando una condena de 50 años en el penal de San José el Alto.
Adicional a esto, han ocurrido sucesos que han estremecido la opinión pública, como las declaraciones de Sergio Bustamante Figueroa, que culminaron con el arresto del llamado “Abogado del poder”, Juan Collado. Este caso cobró tal relevancia que Mauricio Kuri, actual gobernador de Querétaro y Francisco Domínguez, mandatario estatal de ese entonces, fueran mencionados en acusaciones por presunto lavado de dinero relacionadas con la Caja Libertad, una empresa que, por cierto, también tiene su historia con los Gallos Blancos de Querétaro. Este hecho provocó que Dominguez demandara a Bustamante por difamación.
Como si esto no fuera suficiente, el descontento por lo que se percibe como la indolencia del estado ante las injusticias vividas por las mujeres, ha hecho de las fechas fuertes feministas, como el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer Trabajadora, y el 28 de septiembre, Día Internacional por la Despenalización del Aborto, se conviertan en “días calientes” para las corporaciones de seguridad pública, sobre todo por los daños causados a infraestructura.
Finalmente, en la actual administración, antes de que se cumplieran los 100 días de gobierno de Mauricio Kuri. el tema de reemplacamiento, promovido por el mandatario como necesario para generar inversión en el tema de la seguridad, provocó molestia ciudadana, debido al monto del mismo, uno de los más caros a nivel nacional.
En resumen, el “pacífico” Querétaro tiene su propio historial de conflictos, que, por supuesto, van bastante más allá de los aquí mencionados. No hay que olvidar que, después de todo, una tertulia literaria en esta ciudad terminó convirtiéndose en detonante del movimiento independentista en 1810, tampoco que aquí terminó sus días el emperador austríaco Maximiliano de Habsburgo, cuya captura se saldó con la ciudad bombardeada y sitiada por las fuerzas liberales.
La próxima vez que escuchemos que la vocación de Querétaro “es pacífica” hay que pensarlo dos veces.