Empresa de gas propuesta por AMLO podría afectar finanzas públicas: Imco
Aunque el instituto coincidió en la necesidad de que el gas LP se venda a mejores precios a los hogares mexicanos, reiteró que la mejor manera de lograr ese objetivo no es mediante la creación de una nueva empresa que se financie mediante recursos públicos
Crear una empresa gubernamental que se encargue de la venta de gas LP, como la que anunció recientemente el presidente Andrés Manuel López Obrador con Gas Bienestar, no es factible para lograr la baja de precios, al contrario, esto podría afectar las finanzas públicas, informó el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco)
Aunque el instituto coincidió en la necesidad de que el gas LP se venda a mejores precios a los hogares mexicanos, reiteró que la mejor manera de lograr ese objetivo no es mediante la creación de una nueva empresa que se financie mediante recursos públicos y la eventual implementación de precios máximos, sino a través de la promoción de mayor competencia en el mercado.
“La falta de competencia en el mercado del gas LP, que se caracteriza por la concentración en pocas empresas y las altas barreras de entrada, es un problema que afecta a los hogares de menores recursos y que ha sido señalado en diversas ocasiones por la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece)”, detalló el Imco.
Explicó que la posible creación de una distribuidora de gas LP del Estado no solo no resolvería el problema sino que añadiría presión a las finanzas públicas, ya que el mercado se concentraría en un solo jugador que desplazaría a los participantes privados al ser la única con los recursos suficientes para poder vender gas LP a precios menores que su costo real.
“Tal concentración monopólica tiende a prestarse a un uso clientelar. A diferencia del gas natural que se encuentra en yacimientos, el gas LP se obtiene como subproducto del proceso de refinación del petróleo o del mismo gas natural”, añadió.
El IMCO explicó que el alza en el precio del gas LP responde tanto a factores internos como la concentración del mercado en pocos participantes y la baja penetración de las redes de gas natural en las ciudades, como a circunstancias ajenas al país, en especial la creciente demanda en los mercados asiáticos, específicamente China e India.
“En un mercado abierto no es posible determinar precios por decreto. Aunque se establezca un precio máximo en el mercado de venta al consumidor final, los distribuidores de gas LP seguirán comprando el combustible a precios de mercado”, concluyó.