Hay siete medicamentos candidatos a ser el tratamiento contra COVID-19: Gatell
Además, el subsecretario de prevención y promoción de la salud descartó la posibilidad de establecer un toque de queda o estado de excepción para el control de la epidemia
La evidencia científica del uso del antiviral remdesivir para el tratamiento del COVID-19 aún no es concluyente, enfatizó el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, quien dijo, no se debe pasar a su uso generalizado.
En rueda de prensa vespertina en Palacio Nacional, López-Gatell reconoció que no se tiene considerado que exista próximamente una vacuna contra el COVID-19; no obstante, indicó que, a la fecha, han existido cerca de seis o siete medicamentos que se han considerado candidatos a tratamiento para el COVID-19, como la hidroxicloroquina, cloroquina y azitromicina.
En este sentido, señaló que el pasado viernes la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) consideró autorizar el uso del antiviral remdesivir, durante la emergencia sanitaria.
“Todavía la evidencia científica sobre su utilidad no es concluyente y eso en un momento dado, es importante considerarlo, porque no debemos pasar de la evidencia científica inicial al uso generalizado, porque falta mucho por entender si funciona, si es seguro y, si en un momento dado, ese funcionamiento aplicado a condiciones reales (…) pudiera llevar a efectividad”, dijo.
Descartan uso de la fuerza para evitar contagios
En tanto, López-Gatell enfatizó que no se está considerando ningún plan de militarizar la respuesta de salud pública para evitar los contagios del virus; esto al ser cuestionado sobre nuevas medidas, ante la continua presencia de personas en los espacios públicos.
El funcionario federal indicó que las principales causas por las que salen las personas a la calle son el trabajo, la escuela y la recreación; en este sentido señaló que, Mexico es un país con condiciones economías y sociales adversas, en donde la mitad de la población vive en condiciones de pobreza, por lo que desde el principio, el uso de la fuerza se consideró ”inconveniente”.
“Aún en este momento de mayor transmisión, no tenemos plan alguno de militarizar la respuesta de salud pública. No se va a implantar toques de queda, estados de excepción, ni se va a usar la fuerza pública como mecanismo de coerción”, dijo.
En tanto, José Luis Alomía, director general de Epidemiología, destacó que, hasta el tres de mayo, 13 mil 387 camas de hospitalización general se encontraban disponibles para la atención de pacientes en hospitalización general y estaban ocupadas seis mil 222, es decir, el 31 por ciento.
En la Ciudad de México, el 69 por ciento de las camas para hospitalización general están ocupadas, seguido del 63 por ciento en Baja California. Mientras que en el caso de las camas con ventilador, para pacientes con complicaciones respiratorias, la Ciudad de México también encabeza la mayor cantidad de ocupación con el 61 por ciento, seguido de Sinaloa con el 58 por ciento.