¿Por qué ponen cruces en la carretera?
Juan Carlos García Ramos, presidente del Colegio Estatal de Psicología, señaló que colocar una cruz tras un accidente trágico es parte del proceso de duelo que acompaña la “cicatriz emocional” de los dolientes
Hace 39 años, Alfredo viajaba en la parte de atrás de una motocicleta sobre la carretera 85 rumbo a Tecámac, Estado de México cuando cayó del vehículo y perdió la vida.
Con el objetivo de recordar el lugar en donde falleció y para que los hijos, sobrinos y nietos no lo olviden, su familia decidió colocar una cruz en donde encontraron su cuerpo, aunque, según cuentan, fue una experiencia horrible y llena de tristeza.
Significado de la Cruz
De acuerdo con la Asociación Mexicana de Tanatología A.C. (AMTAC), la población mexicana, predominantemente católica, tiene una gran estima por la Cruz, además que se utiliza en variadas formas que van desde bendecir la comida o el dinero de la primera venta, hasta hacerse una “limpia” o colocarla en las tumbas y sitios donde hubo un accidente.
De acuerdo con Benedicta Sánchez, catequista de la parroquia de Nuestra Señora de la Esperanza, la Cruz representa la muerte de Jesús, así como la misma Cruz que cargan las personas a lo largo de sus vidas hasta que llegan al “reino de Dios”.
“La cruz representa la muerte de Jesús que a la vez en nosotros representa lo que nosotros ayudamos a la cruz en nuestra vida, a veces nos puede ir bien, a veces nos puede ir mal, pero es nuestra cruz que tenemos, entonces cuando morimos ya vamos cargando nuestra cruz para ir al reino del Dios”, explicó Benedicta.
Por su parte, Juan Carlos García Ramos, psicólogo clínico y presidente del Colegio Estatal de Psicología, considera que además que la cruz señala dónde falleció una persona, también se piensa que es el lugar desde donde las personas tendrán que “trasladarse” al lugar de la otras vida.
Agregó que también colocar una cruz tras un accidente trágico es parte del proceso de duelo que acompaña la “cicatriz emocional” de los dolientes, pues este tipo de situaciones generan una negación de lo sucedido y la cruz es un recordatorio de la ausencia de su ser querido.
“También dentro del proceso de duelo hacer este tipo de registros en los lugares que bien pueden compararse como la cicatriz emocional que queda en los dolientes de un proceso de duelo para recordarlos y de esta manera asumir esta parte del duelo que implica una negación, que quiere decir, que aunque los dolientes saben lo que sucedió, saben que la persona murió en ese lugar por diversas causas es algo que no se acepta del todo fácilmente, es una realidad que muchas veces nos cuesta aceptarla y esto da presencia a esa ausencia que van a tener durante el resto de su vida”, explicó el especialista.
Mencionó que tal vez es una forma dolorosa de recordar la situación en la que falleció su familiar, además que se tendría que analizar cada caso para ver si la cruz genera conductas inadecuadas a la persona.
Explicó que las conductas inadecuadas que podrían generase es una conducta compulsiva de visitar la cruz constantemente, o que se dé una vida prolongada a la cruz.
“Puede ser inadecuado si está acción les conlleva una conducta compulsiva de irlo a visitar, de irle a llevar flores, de que esta presencia de esta cruz la siguen manteniendo durante mucho tiempo”, precisó García Ramos.
Manifestó que aunque en ocasiones es mal visto cuando una cruz es abandonada, señaló que es un proceso normal y natural del ser humano, pues es una manera de aceptar la pérdida de la persona y de haber superado el duelo.
“Generalmente en estos lugares que ahí se marca son olvidados por las personas y es normal y natural y así debe ser, uno debe dejar a los muertos no en el olvido total, pero si, sin la importancia o el significado especial durante mucho tiempo, es la manera en la que uno resuelve lo duelos aceptar la realidad y hacer su vida como de ser.“, indicó.
Otros tipos de Cruces
Asimismo, el especialista en Psicología observó que las cruces se colocan solo donde hechos trágicos, pues no se colocan en hospitales u otros lugares públicos; sin embargo, hay ocasiones en que las personas optan por levantar una cruz o un altar en sus hogares permanentemente y no solamente cuándo son las festividades de fieles difuntos.
Detalló que donde se colocan estas cruces, las personas conviven con el recuerdo de sus familiares a la hora de la comida o “les encargan la casa”, y así es así como consiguen sobrellevar el duelo.
“Es otra forma de poner la cruz, el altar (…) muchas personas hablan con sus fallecidos que están ahí, con las fotografía que han colocado, les hablan, les dicen que les encarga la casa, cuando van a comer les invitan de comer, les agradecen la comida muchas veces forma parte de mucha cotidianidad de las personas, esa es una forma de sobrellevar el duelo no quiere decir que se haya resuelto, sino lo sobrellevan y lo mantienen”, puntualizó.
Asimismo indicó que la tradición mexicana de Día de Muertos, aunque es muy interesante y parte de la cultura de nuestro país, “suele ser muy dolorosa después de muchos años” y eso parece ser inconveniente porque la persona resignifica sus recuerdos, sus dolores, tristezas y le imposibilita llevar una vida sana y placentera.
28 de octubre
En algunos lugares, además de festejar a San Judas Tadeo, también comienzan sus celebraciones de Día de Muertos, pues algunas familias colocan altares para aquellas personas que fallecieron en algún accidente o de forma violenta.
Las personas suelen colocar un vaso de agua, una veladora, flores, un pedazo de pan y purifican el altar con algo de incienso.
Benedicta tenía 18 años cuando murió su primo Alfredo en esa carretera hacia Tecamac, hoy en día muy conocida por el nuevo aeropuerto de Santa Lucia. Además que aseguró que cada año sus familiares siguen llevando flores cada Día de Muertos para recordarlo.