Cerca de 600 personas internadas en “anexos” no deberían estar ahí: Guillermo Tamborrel

De las mil 800 personas que actualmente están internadas en centros de tratamiento en el estado de Querétaro, al menos 600 no requieren estar ahí puesto que no consumen ningún tipo de droga o presentan trastornos como esquizofrenia o bipolaridad, acusó Guillermo Tamborrel Suárez, comisionado de la Comisión Estatal Contra las Adicciones (CECA).

En entrevista, comentó que solo cinco de los 90 centros de tratamiento que hay en el estado cuentan con reconocimiento de la Comisión Nacional Contra las Adicciones, 35 trabajan en condiciones “aceptables”, mientras que 50 aproximadamente deberían estar cerrados. A esto se suma que no existe un marco jurídico adecuado para su vigilancia.

“Tienen internados a mil 800 personas, de estas una tercera parte alrededor de 300 son personas que sí requieren estar internadas por un problema de adicciones, hay otras 600 personas que sí está consumiendo algún tipo de droga y recibirían un mejor tratamiento en uno de nuestros centros de atención primaria, con terapia sin internamiento y lamentable otras 600 personas están ahí y no debieran estar, lamentablemente estos centros se han convertido en un depósito humano donde la sociedad ha optado por deshacerse de seres humanos”, indicó.

El titular del CECA dio a conocer que ha dialogado con diputados y diputadas locales para contar con un marco normativo que permita la operación correcta de los también conocidos como anexos en la que se propondrá que exista una comisión al interior de la dependencia encargada de supervisar este tipo de espacios.

Los principales problemas que a la fecha se enfrentan en los centros de internamiento son por la falta de licencias de funcionamiento, los cambios de uso de suelo, el incumplimiento de medidas de seguridad mínimas y la aplicación de medidas sanitarias; las áreas encargadas de estos aspectos, agregó, no cuentan actualmente con facultades para supervisar u operar los centros de tratamientos.

“Queremos ser nosotros, queremos revisar el funcionamiento terapéutico, eso es lo que hoy nadie está vigilando, es esto lo que estamos por plantear, queremos ser una nueva comisión, tendrá que estar por un lado el consejo estatal y por otro lado una comisión estatal y que sea ésta la ejecutora; espero que pueda estar este año”, indicó.

En cuanto al anexo donde fue internada una lesbiana para “curar su enfermedad”, Tamborrel Suárez calificó como repudiable y retrógrada considerar a la preferencia sexual como una enfermedad, además de que criticó que este espacio se haya prestado para internar a la chica.