Busca boxeo mexicano acabar con la sequía de medallas

El boxeo mexicano tiene una larga tradición en Juegos Olímpicos. Durante la mayor parte del siglo pasado fue la disciplina que, con 11 medallas, más éxitos había reportado a nuestro país, sin embargo, desde Sydney 2000, los peleadores mexicanos no han vuelto a subir al pódium de los vencedores.

Raúl Cougar Curiel, nacido en Tampico Tamaulipas, y Misael el chino Rodríguez de Parral, Chihuahua, figuran entre los seis representantes que tendrá México en esta disciplina en Río 2016, y tomarán parte en las divisiones de los 64 y los 75 kilogramos.

Para el peleador tamaulipeco, llegar a los Juegos Olímpicos es parte de un sueño que está en proceso de cumplirse en todas sus partes. “Estoy muy contento y muy motivado por haber alcanzado  mi sueño, es algo que yo he imaginado desde muy corta edad y pues bueno me ha servido para pensar en el futuro, en mi futuro como boxeador”.

Por su parte, Misael Rodríguez, que tuvo que ir a Argentina a lograr su boleto, ya en condiciones diferentes, sabe que su carrera ha sido corta, pero es necesario reconocerle que ha sido al mismo tiempo fulgurante. “Cuando logre el pase en Argentina,  al siguiente día, iba corriendo y sentía como que era irreal, yo nunca me imagine así, llegar tan lejos en tan corto tiempo, tengo dos años en la Selección Mexicana, mis compañeros Raúl y Elías tienen 4 y 6 años de estar aquí concentrados, y eso me demuestra que estoy haciendo las cosas bien, tengo que seguir por el mismo camino y pues como te digo emocionado, yo pienso que nadie tiene limites y que nosotros podemos lograr lo que queramos, lo he demostrado”.

UNA CELOSA DISCIPLINA. Ambos peleadores saben que el boxeo es una disciplina muy celosa, que exige no sólo entrega sino un gran sacrificio, aquellos que llegan a trascender en este deporte han dejado atrás las comodidades, la rutina y la zona de confort en la que es fácil caer. Más aún es necesario tener objetivos claros y estar dispuesto a cumplirlos, “Yo creo – nos dice Curiel – que es un trabajo muy difícil, la persona que llega a clasificar a Juegos Olímpicos o tener una carrera al 100 % como la mía que es muy pesada que es el boxeo estaría mintiendo si no reconoce lo complicada que es, muy difícil la verdad, diría yo demasiado difícil pero con trabajo se puede, yo desde muy pequeño soñaba con ir a Juegos Olímpicos, pero ya sabes que poniendo a  Dios y trabajando muy fuerte se pueden lograr las cosas…”.

Misael señala un aspecto crucial en el boxeo, el peso, “Uno de los asuntos más complicados para nosotros es la báscula, debes de cuidarte todo el tiempo, que comes, a que hora comes, vamos, hasta la cantidad de agua que tomas, claro que cuando logras el objetivo de ganar la pelea, es cuando ves la recompensa a tantos sacrificios”.

Luego, Curiel hace énfasis en como cambian las cosas el auto convencimiento necesario para seguir adelante, “Tienes que convencerte de que será literalmente tu estilo de vida, a veces te gana el sentimiento, dejas a la familia, a los amigos, te entran las dudas, pero tienes que confiar en ti, y convencerte de que sabes porque viniste, y yo tengo muy presente, por ejemplo, lo que le dije a mi mamá, que no regresaría a casa sin el boleto olímpico, ya lo tengo, ahora viene lo más importante, pero sin sacrificio no hay éxito”.

EL COMPLICADO ESTILO OLÍMPICO… El boxeo mexicano tiene una escuela que se ha basado históricamente en la audacia de sus peleadores, sin embargo, esto también ha sido un rival a vencer en el complicado boxeo olímpico, donde los representantes de los países del Este de Europa, tradicionalmente han sido la potencia junto con Cuba y Estados Unidos… Ha sido necesario complementar ese estilo frontal con otras escuelas boxísticas.

Según apunta el chihuahuense Misael Rodríguez, también el cambio de reglas puede llegar a ser visto como algo benéfico para el estilo de los peleadores mexicanos.

“Ha cambiado un poco con este asunto de la AIBA que quiere meter boxeadores profesionales, de hecho se asemeja mas ya a lo que es el boxeo profesional y eso pienso yo que nos ayuda a los mexicanos porque el estilo lo tenemos ya natural, los boxeadores europeos son muy fuertes pero son su estilo tradicionalmente se nos ha complicado, en cambio los mexicanos vamos siempre hacia adelante, a rifarnos el físico ahora si, a estar ahí en un intercambio de golpes.

“Lo que vas a hacer arriba del ring lo decides en un segundo, -complementa Curiel – pero el estilo que tengo es producto del trabajo de mi papá, de cuando él me entrenaba, muy fuerte, muy intenso, pero ahora lo he ido complementando con el paso del tiempo, incluso trabajé con el cubano Eduardo Morera, que me enseñó tanto la técnica de su país, como la de Europa, contragolpear, manejar las piernas. Pero sí, los mexicanos usualmente la pasábamos mal en Juegos Olímpicos”.

TRAS UNA MEDALLA… El optimismo natural de dos jóvenes que han tenido sonados éxitos internacionales en el deporte amateur, es parte de la mentalidad con la que espera el boxeo mexicano en pleno, que finalice una larga sequía de 16 años sin subir al pódium olímpico del deporte de los puños…

La última presea que obtuvo México, vino a través de un chihuahuense, Cristian Bejarano, paisano de Misael Rodríguez que espera traer a casa una medalla: “A mi en lo personal me motiva, además porque Cristian Bejarano es mi paisano, lo conozco es una persona que admiro bastante y pues me gustaría que fuera yo otro chihuahuense quien devuelva a México la gloria de subir al pódium en unos Olímpicos, yo he trabajado bastante y se que la gente está deseosa de resultados y también se que van a estar pendientes de o que hagamos, me encantaría que por mi conducto llegará la alegría de una medalla”.

Curiel es muy frontal en declaraciones y en sus sentimientos al respecto, “Yo me estoy entregando al ciento por ciento en mente y en cuerpo para poder llegar bien a Juegos Olímpicos, si han pasado 16 años, pueden pasar mil si quieren , yo se que puedo quitar la racha, acabar con esa sequía que hay sin medallas, confío en mi, me duermo todas los noches y me despierto encomendándome a Dios y él me va a dar las fuerzas, porque además, siempre que doy mi mejor esfuerzo pasan cosas buenas”.

EL DEPORTE DE LOS POBRES…  El boxeo siempre ha sido llamado así, se ha convertido históricamente en la única puerta de acceso a una vida digna para muchos jóvenes en México y en el mundo. Quizá por eso tenga tantos adeptos y por eso a los boxeadores se les respeta. En el boxeo se arriesga todo cada segundo que transcurre arriba del ring, no hay tiempo para reflexionar o para temer a pesar de que se pone en riesgo todo. Raúl Curiel lo sabe y ha dado todo su esfuerzo para aprovechar su oportunidad.

“A mi nadie me ha regalado nada, todo lo he hecho a base de esfuerzo y mi esfuerzo ha quedado demostrado en el ring, le he ganado a lo mejor del mundo, cada vez que subo al ring, sólo pienso en ganar, y en dejar atrás los tiempos difíciles, el boxeo me ha abierto puertas y puede abrirme el mundo, y yo pienso aprovechar mi oportunidad…”

Misael Rodríguez, quien competirá en la división de los 75 kilogramos, se da cuenta como ha ido cambiando el panorama, pero sin dejar de ver que es precisamente el boxeo el que le ha abierto las puertas a él mismo…. “Pienso que ya es tiempo de cambiarle la cara, hemos estado platicando con el presidente de Federación, la otra vez nos hacia una comparación que hace 15 años los boxeadores que había internos aquí en concentración no tenían mas que la primaria, la secundaria terminada o algunos ni siquiera tenían estudios, es un deporte, como tu dices, de los pobres, porque aquí es mucho el esfuerzo, mucho el sacrificio que no cualquiera esta dispuesto a ser y los pobres pues por no tener estamos dispuestos a sacrificar todo por lograr algo en la vida”.

LOS COLORES DE MÉXICO… Al final del camino, tanto Raúl Curiel como Misael Rodríguez entienden que la misión ya no lleva únicamente la responsabilidad a título personal, en el momento en que obtuvieron su calificación a los Juegos Olímpicos de Río, sabían que sus sueños son ahora colectivos porque representan a su país, a México.

“Es un orgullo portar la bandera de México – dice Misael – yo pienso que donde te pares debes de hacer lo mejor por tu país, he tenido la fortuna de visitar muchos lugares, he ganado torneos internacionales, he ganado medallas en Centroamericanos y Panamericanos y ha sido una experiencia única verme con el uniforme nacional y ver ondear la bandera de México”.

Raúl se expresa también profundamente emocionado sobre la experiencia que está a punto de vivir: “Estoy muy ilusionado, muy emocionado por representar a mi país, son unos Juegos Olímpicos, no puedo prometer una medalla, pero si que voy a representar con mucha dignidad y con orgullo a México y que pelearé como nunca para traer esa medalla a nuestro país”.