Mamá Dolores Cartonera presenta catálogo de otoño en el Museo Regional
La editorial presentará la novela corta «Himno para una chica de 17 años», de Eduardo de Gortari, y el texto dramático «Cómo no estar solo», de Juan Carlos Franco. En entrevista con Códice Informativo, Franco y el director editorial de Mamá Dolores, Felipe Bohorquez, explicaron la propuesta artística que conlleva la presentación de su catálogo de otoño.
Este viernes 27 de noviembre, en punto de las 20:00 horas, el auditorio del Museo Regional será sede de la presentación de los libros Himnos para una chica de 17 años, de Eduardo de Gortari, y Cómo no estar solo, de Juan Carlos Franco, títulos que componen la colección de otoño del Grupo Editorial Mamá Dolores Cartonera. En entrevista con Códice Informativo, el autor de Cómo no estar solo y Felipe Bohorquez, miembro del consejo editorial de la cartonera, explicaron sus proyector editoriales y la propuesta artística que conlleva esta presentación.
Códice Informativo: ¿Qué detalles nos pueden adelantar de lo que pasará este viernes?
Juan Carlos Franco: Mamá Dolores y Catamita presentamos el libro de Eduardo de Gortari, que es de narrativa, es una novela corta, y mi libro de dramaturgia. La lectura de Himnos para una chica de 17 años va a incluir un set list acústico con Pablo Guerrero, Cómo no estar solo será una lectura dramatizada en la que actuaremos Anna Karen Langarica y yo, también va a haber un diálogo entre autores. Este evento seguirá con la esencia de Mamá Dolores que es expandir un poco la literatura, ofrecer algo más allá del producto literario, en este caso libros objeto, libros artesanales.
CI: ¿De qué van los proyectos de las cartoneras?
Felipe Bohorquez: Las editoriales cartoneras surgen en Argentina, con la caída de la bolsa y todo el problema económico del 2001, lo que se buscaba era hacer publicaciones de la manera más efectiva con los recursos que se tenían, entonces se piensa en los cartoneros, así se le llama a la gente que recoge basura en Argentina, y comienzan a trabajar con ellos recuperando el cartón al que todavía se le pude dar un buen uso para fabricar estos libros. La editoriales cartoneras tienen tanta fama que ahora que, incluso el que yo considero el escritor argentino más famoso de esta generación, Washington Cucurto, empieza en las cartoneras. El movimiento se expande por Latinoamérica de una manera loca, se estima que existen alrededor de 150 editoriales cartoneras en el continente. En las cartoneras mucho tiene que ver con el reciclado, con el reutilizar algo ya existente, y estas han tomado el mismo rol de las editoriales independientes, que es darle espacio a escritores que quizá en editoriales comerciales sería más difícil que consiguieran ser publicados.
Juan Carlos Franco: Esas eran las reglas de las cartoneras hasta hace unos años, hoy en día hay autores ya consagrados que publican en cartoneras.
CI: ¿En dónde trabaja Mamá Dolores?
FB: Nosotros somos un poco clandestinos. No tenemos un espacio definido porque la mayoría de los que trabajamos en el proyecto tenemos otras ocupaciones.
CI: ¿Tienen alguna intención comercial?
FB: No estamos buscando competir con grandes editoriales, no es para nada la idea, la idea es más bien tener una serie de libros objeto. Los tirajes son muy cortos, del libro Himnos para una chica de 17 años sacamos 50 números y de Cómo no estar solo van a ser 75. No buscamos hacer un gran negocio, para nosotros es mucho más importante tener textos de calidad y buscar formas creativas de presentarlos. Aún así nos ha ido muy bien, hemos podido expandir el proyecto porque ganamos el Apoyarte de este año.
CI: Háblanos de Cómo no esta solo, Juan Carlos.
JCF: Cómo no estar solo es una obra que surgió con Marta Ramírez Mega, que es una escritora y directora del D.F., con ella empezamos a lanzar temas que nos interesaban y los dos temas centrales a los que llegamos fueron las relaciones amorosas en la era digital y la rebeldía joven. Durante el proceso estuvimos charlando con actores, después cuando me fui a escribir salió este texto que, más que plantear una anécdota concreta o realista, lo que hace es que, a partir de la metáfora del terremoto, construye alrededor de estos temas. La obra habla de dos personajes que, en un mundo donde se pueden predecir los terremotos, viajan al epicentro, acampan ahí y esperan a que el terremoto los sacuda, todo el tiempo pensando que esa será la experiencia más fuerte que van a sentir en su vida. Mientras estos personajes esperan se cuentan historias donde la realidad se empieza a confundir con la ficción y esa era la parte que me interesaba a mí para unir los temas que habíamos propuesto en un inicio: la relación difícil, inconstante, entre la ficción y la realidad.
La obra ya ha tenido dos temporadas en D.F., participamos en las eliminatorias en el Festival Internacional de Teatro Universitario y somos finalistas, el festival es en febrero. Ahora como libro, el hecho de que se publique dramaturgia ya es un logro, porque es género que no tiene mucha salida porque dentro del mundo literario siempre es pensado como un medio para un fin, que sería la escenificación, y porque, dicen, que es muy difícil de vender. Pero creo que leer la obra antes de presenciarla puede ser una experiencia muy interesante, sobre todo para aquellos que no están acostumbrados a leer teatro.
CI: ¿Ya habías publicado libros?
JCF: Este es mi primer libro en solitario. Estoy súper contento porque es un libro único, artesanal, y las ediciones de Mamá Dolores son, además de muy bonitas en el diseño, están muy cuidadas en lo editorial. Va a estar padre la presentación porque Eduardo de Gortari y yo somos buenos amigos desde hace tiempo, fue una coincidencia que los dos libros fueran presentados al mismo tiempo, nos vamos a presentar mutuamente y creo que va a ser, además de una presentación entre lectores, uno del otro, una presentación entre compas.