Estado mexicano tiene una deuda histórica con los exbraceros, lamenta organización
Más de 4 mil billones de pesos que se perdieron en los últimos 70 años
Cuando en la década de los años cuarentas se firmó un acuerdo bilateral entre Estados Unidos de América y México para que millones de trabajadores mexicanos prestaran su fuerza de trabajo en el país del norte, se firmó una cláusula en el contrato de los conocidos como “braceros”.
Para generar un fondo que permitiera la adquisición de insumos agrícolas, el Estado mexicano tomó el 10 por ciento del salario de los trabajadores, que fue depositado en bancos norteamericanos como Well Fargo y Union Trust, y posteriormente trasladados a México y depositados en bancos como el Banco Nacional de Crédito Agrícola, el Banco Nacional de México y al entonces Banco Nacional de Comercio. Sin embargo, ese dinero nunca llegó a las manos de los trabajadores.
Hoy en día, son 4 millones y medio de exbraceros a quienes se les debe una cantidad superior a los 4 mil millones de pesos que se fueron acumulando en los últimos 70 años junto con los intereses que el recurso ha generado. Baldomero Capiz, presidente de la Unión Binacional de Organizaciones de Trabajadores Braceros 1942-1967, considera esta la deuda más grande tanto moral como económica que tiene el Estado mexicano con sus migrantes.
“Se estableció dentro de alguna de las cláusulas un descuento del 10 por ciento a su salario de trabajo. Este originalmente era para que los trabajadores mexicanos cuando fueran a laborar tuvieran recursos para comprar implementos agrícolas, pero si no compraban esos implementos, les sería devuelto ese dinero“, aseguró el líder migrante.
Mientras los exbraceros buscan recuperar su dinero mediante demandas colectivas, ya en este 2014 obtuvieron una victoria judicial, ya que en mayo pasado les fue concedido el amparo por un juez federal de la capital del país para que se les paguen los mil 523 millones de pesos adeudados por la omisión por parte del Ejecutivo federal y la Cámara de Diputados de destinar recursos públicos al fideicomiso 21230 entre 2012 y 2014. Dicho fideicomiso fue creado en 2005 durante el gobierno de Vicente Fox, como un apoyo social para los antiguos migrantes a quienes se les sigue adeudando aquel 10 por ciento de su sueldo que acabó en manos desconocidas.
“Este es un adeudo que se tiene que pagar por la Cámara y del gobierno mexicano a 40 mil 87 exbraceros que tienen su hoja azul de pago“, afirmó Baldomero Capiz.
Con ese fideicomiso apenas se han cubierto las necesidades de 181 mil exbraceros, a quienes se les entregaron 38 mil pesos anuales entre 2005 y 2011. Sin embargo, apenas representa una mínima parte de los cuatro millones y medio de exbraceros que existen en el país. Baldomero Capiz advirtió que de manera colectiva los antiguos trabajadores migrantes pelearán judicialmente se haga por fin justicia y les sea devuelto aquel 10 por ciento de su salario que les arrebatado y nunca devuelto en la década de los años cuarentas.