“Círculo vicioso”
En la opinión de Alejandra Caballero
Cuando tengo que hablar de Gallos, es desilusionante pensar en lo que voy a decir, y sólo se vienen a la mente problemas, descenso, lo mismo, lo mismo y lo mismo, porque así es, nada ha cambiado, ni para bien, ni para mal…
Los queretanos siguen con los mismos puntos en la porcentual, siguen sin ganar, también siguen sin perder, sólo sumando empates; Ignacio Ambriz sigue con el mismo discurso de que es nuevo y se está adaptando =/ (Así nos va a dar la jornada 17 y no se van a adaptar).
La semana pasada perdieron tres puntos de oro ante Atlas y todo porque les dio miedo arriesgar, jugaron al empate, a Atlas le funcionó muy bien, pero a Gallos no le sirvió de nada.
Esta semana los queretanos tienen una segunda oportunidad de aprovechar la localía, ahora reciben a Monterrey, un equipo que no ha podido ganar fuera de casa, pero que tampoco los Gallos le han podido ganar en La Corregidora.
Y los problemas aquí no terminan, a ese saco que llevan cargando los queretanos, que va lleno de piedritas, se le suma una más con la multa impuesta a Adolfo Ríos por parte de la Comisión Disciplinaria por las declaraciones en contra de Zanjuampa (El árbitro que no pitó a tiempo y “le quitó” el triunfo a Gallos contra Atlante) y un problema más cuando en la semana le impidieron el acceso al Centro Gallo a Adrián García Arias. El argumento fue que no acató una orden, se le pidió viajar como DT de la Sub 20 a Cancún y no quiso, porque lo querían mandar en camión. (Podrá sonar sangrón, pero cualquiera podría negarse a hacer un viaje de tantas horas).
La realidad es que parece que todo es un círculo vicioso, las cosas no van bien con la directiva, ni con los jugadores, ni en la cancha y todo afecta a todo, aunque digan que no: no hubieran hecho tan grande lo del árbitro si no se peleara el descenso, para los jugadores, corren a un compañero, multan a su directivo, no ganan, su DT no se adapta… ¿qué sigue? ¿Nos tenemos que empezar a resignar?
Este sábado otra vez muchos llegarán al Estadio La Corregidora llenos de ilusión, con la esperanza de saber si esta es la buena, porque aunque un triunfo no salvará a los queretanos, sí los hará y nos hará volver a creer para seguir luchando por un equipo que sí entregue todo en la cancha.