Nuevo Código Urbano reordena desarrollo territorial de Querétaro

El gobierno del estado de Querétaro presentó este miércoles la iniciativa de Ley del Código Urbano para la entidad, que busca modernizar el existente, el cual fue publicado en 1992 y ya ha sido rebasado por el crecimiento poblacional.

El secretario de Gobierno, Jorge López Portillo Tostado, indicó que el proyecto, consensado con representantes empresariales, legisladores y gobiernos municipales, contempla la regulación de programas de planeación urbana, ordenamiento y regulación territorial de los asentamientos humanos. También normaliza los desarrollos inmobiliarios, como fraccionamientos y condominios. Además da a los municipios la atribución de expedir la reglamentación en materia de construcciones y de anuncios publicitarios, para preservar la imagen del paisaje.

Asimismo, reglamenta la prestación del servicio de agua potable, y la disposición de aguas residuales, así como la planeación y conservación de carreteras, caminos y vialidades urbanas.

Por su parte, el gobernador José Calzada indicó que la política de desarrollo urbano merece un nuevo instrumento normativo.

“Una legislación que reconozca al suelo, como un recurso estratégico; instrumentando sin sesgos, ni privilegios”, advirtió.

Señaló que es necesario establecer condiciones para cambiar la forma en que se construye y da viabilidad a las ciudades, sobre todo en la zona metropolitana que, dijo, ha crecido de manera exponencial su población.

“Las consecuencias de un crecimiento espacial desordenado ya las conocemos, y se sintetizan en saturación, falta de orden y altos costos económicos por dotar de infraestructura social básica” comentó.

En el patio central de Palacio de Gobierno, el mandatario indicó que esta iniciativa contempla la creación de dos instituciones: un órgano de planeación metropolitana y la Procuraduría Urbana con facultades coercitivas, que permitirán sancionar a quienes quebrantan la normatividad de un crecimiento sustentable.

Calzada Rovirosa reconoció que la actual legislación no tiene la fortaleza para guiar el crecimiento del Querétaro contemporáneo.