Parque nacional El Cimatario enfrenta plagas y sequías

Tres mil árboles han muerto en el Parque Nacional de El Cimatario, ubicado en el sur de la capital queretana, a causa de la plaga del gusano descortezador, que se ha propagado de una forma muy rápida, indicó la arquitecta Pamela Siurob, directora de este sitio.

Señaló que además de esta problemática, el parque se ha visto afectado por las altas temperaturas, las radiaciones de rayos ultravioleta, y la sequía que ha predominado en los últimos meses en la capital.

“Son cerca de 200 hectáreas en donde al estar tan cerca los árboles unos de otros, con el aire, se pasa el escarabajo de un árbol a otro, cuando el escarabajo entra a un árbol toma la savia hasta que muere el árbol, cuando empieza a morir se traslada por los vientos a los otros árboles”, explicó en entrevista con Códice Informativo.

Indicó que se dio aviso a la Comisión Nacional Forestal (Conafor) y a la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), con el propósito de que definan las líneas de acción para enfrentar esta circunstancia; sin embargo, hasta ahora no ha habido respuesta.

“Estamos esperando la respuesta (…) el trámite se introdujo en marzo (en Semarnat), en Conafor en enero, el 21 de enero, para que nos dijeran qué podamos hacer y para que existieran recursos para poder realizar alguna acción, porque el parque cuenta con pocos recursos. Entonces estamos esperando la respuesta, hay muy buena voluntad por parte de Conafor, nada más está esperando la respuesta de Semarnat”, detalló.

Además, explicó que investigadores de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) serán quienes brinden asesoría en esas tareas de reforestación, en la que sólo se contemplarán plantas del mismo continente, por que ya tuvieron la experiencia con flora traída de Afganistán, que no resistió.

En un recorrido por las brechas corta fuegos ubicadas en este escenario natural, Siurob explicó a Códice Informativo que no obstante, continúan con las acciones de reforestación en otros puntos del parque, con flora adulta que se ha traído de las áreas del Subsistema de La Cañada, donde se llevan a cabo obras de vialidades.

Es decir, que las plantas que se han retirado de la zona de La Cañada, a causa de las obras viales, han sido resembradas en el Parque Nacional de El Cimatario y están ya creciendo de forma sana.

“Ahorita llevamos 400 ejemplares sembrados, y de esos 400 nada más perdimos 20. Son un verdadero éxito, por que vienen árboles grandísimos de 4 metros, pero ya tienen brotes verdes”, detalló con la pasión que caracteriza a una defensora del medio ambiente.

La importancia de El Cimatario

Ubicado en lo que fue un volcán, a un lado de la carretera Querétaro-Huimilpan a pocos minutos de la capital queretana, este espacio fue decretado Parque Nacional hace 30 años durante la administración del gobernador Rafael Camacho Guzmán, quien lo solicitó al presidente de la República.

Actualmente es dirigido por la arquitecta Pamela Siurob, quien lleva seis años en el cargo, aunque ha luchado por este parque desde hace varias décadas, al grado de poner de sus recursos para la alimentación de algunos de los animales que habitan en él.

Su equipo está integrado por 7 vigilantes, 2 veladores, 3 guías, un chofer y un ingeniero.

Y con sólo estos 14 empleados se deben atender las labores diarias de preservación de este sitio natural.

El parque también es el hogar de varias especies de animales que viven en libertad en la zona de restauración, como zorra roja, plateada, varias familias de linces, venados, cacomixtle, zorrillos y tlacuache.

Además, sirve de albergue para animales en cautiverio que fueron rescatados con algunas heridas o entregados por personas que los tenían como mascotas, como mapaches, búhos virginianos, halcones cola roja, tortuga oreja roja y caracaras.

Pamela Siurob revela en la entrevista con Códice Informativo que cuentan con un presupuesto de más de 600 mil pesos al año para la alimentación de los venados.

Sin embargo, con pena reconoce que en el caso de los mapaches y de las aves que están en resguardo, los gastos van por cuenta de ella y la veterinaria que los atiende. Y es que, dice, trabajar en el parque es un compromiso de vida.

En la zona de restauración también se ofrecen visitas guiadas a cuevas, además de que sus brechas corta fuego (creadas para evitar que se propague un incendio), son usadas por corredores y practicantes del ciclismo.

Y por si no fuera suficiente con todas las ventajas que ofrece, de acuerdo con su directora, también sirve como fábrica de agua de la ciudad de Querétaro, “porque permite la filtración rápida a lo que son los acuíferos del valle de Querétaro”.

Añadió que por la sequía, sólo 4 de los 22 bordos que hay en el parque, tienen agua, aunque sólo a un 15 o 20 por ciento de su nivel.

En contraste, este sitio, también tiene un parque recreativo llamado Cimacuático, en el que hay albercas, áreas verdes, asaderos y juegos infantiles, para que las familias puedan acudir, con un costo muy bajo.

Al respecto, Pamela Siurob lamentó que los padres de familia prefieran llevar a los niños a los centros comerciales, en lugar de fomentarles el gusto por la naturaleza.

“A mi me lastima ver que los fines de semana, a los niños se los llevan a los centros comerciales y nada más están pidiendo dinero, fomentan un consumismo espantosos (..) hagamos que convivan, que corran y que palpen lo que es la naturaleza”, recomendó.

Los peligros de El Cimatario

Tras la devastación forestal que tuvo el Parque Natural de la Primavera en Jalisco, por un incendio, la directora de El Cimatario, reconoció que también en esa área existen riesgos de conflagraciones. Señaló que el 98 por ciento de los incendios son creados por el ser humano.

“Aquí en el parque, gracias a la vigilancia y al apoyo de nuestros aliados, en cuanto empieza a haber humo inmediatamente se mueve una brigada para atacar los incendios. Hace como tres semanas tuvimos uno en el cerro de Santa Teresa; y no fue ni media hectárea (…) inmediatamente se apagó”.

Finalmente, en la entrevista con Códice Informativo, en medio de cientos de árboles y teniendo de fondo cerros y el sonido del viento, Pamela Siurob asegura que el Parque Nacional de El Cimatario está libre de padecer un cambio de uso de suelo, como sucedió con Peña Colorada.

“Tiene un decreto expropiatorio, la mayoría de las tierras ya están pagadas e indemnizadas, y las que no están expropiadas, entonces no hay posibilidad de que se le cambie el uso de suelo”, advirtió.