Las razones de Pancho

Los resultados electorales de este año lo alentaron – los mejores de su partido en el país – pero el cerco, el de adentro y el de enfrente, le orillaron a repensar las cosas.

Y Francisco Domínguez Servién, el gobernador de Querétaro, decide no buscar la dirigencia nacional del PAN.

Las visiones, con los de adentro, son encontradas.

“…al no encontrar por ahora, las condiciones democráticas que, por vocación, convicción y por el bien de México, deberán animar (en el PAN) su vida interna”, señaló el gobernador saliente en su mensaje a la ciudadanía para anunciar que deja la candidatura.

Y es que Pancho no comulga con la visión “padronera” de Marko. Y menos con la de Ricardo. Viejas diferencias los separan.

“Cómo panistas, debemos renovar nuestra visión. Asumirnos como oposición y como opción; el país lo necesita, la sociedad lo demanda”. Señaló Pancho en su Facebook, en un mensaje que retumbó por todo el país.

Lo logrado en Querétaro – “carro completo” que no se veía aquí desde los tiempos priistas de Mariano Palacios, que fue el último que lo logró – y el despegue económico que Pancho le infundió, la “deuda cero” en las finanzas estatales, la coincidencia de varias calificadoras nacionales y extranjeras como el mejor estado, hacían coincidencia en tiempo con el final del sexenio local. Además, su trato conciliador con el gobierno federal de no subirse al ring al que se treparon los gobernadores federalistas de su partido.

Este y visto así, era su tiempo.

“Necesitamos un partido unido, abierto y transparente, limpio y democrático”, continuó diciendo.

Aquí mismo así lo concibió. Y lo operó a través de la dirigencia estatal.

Y ahora, con la tendencia absolutista del gobierno de enfrente, venía Pancho con otro concepto. Exigencia de los tiempos.

“(Necesitamos un partido) que gane las elecciones por el voto que respalde lo que hacemos bien y no conformarnos con ser beneficiarios del voto de castigo contra otros”.

“Uno que vuelva a ganar votos y que no se congratule por dejar de perderlos…uno que se acerque a la sociedad y se reconecte con la realidad del México más humilde”.

Esta, es la esencia de la filosofía electoral del gobernador de Querétaro. Además, ciento por ciento humanista y de identificación social.

Y al término de su mandato, que es el último de este mes, dice lo que, en los días que siguen, se habrá de dedicar:

“Con esto, cerraré un capítulo. Abriré un espacio a la reflexión y al trabajo en mi sector como empresario ganadero”.

Pero no cierra, del todo, el activismo social, ni el de partido.

“Estoy convencido que juntos abriremos otros más. Será parte de una nueva narrativa panista propositiva y autocrítica, centrada en nuestras fortalezas, en nuestros mejores gobiernos, en nuestros logros y convicciones.

“Trabajaré para servir a México, me encuentre donde me encuentre”.

Mauricio Kuri – transcendió – lo escuchó más de una vez.

Y aquí en Querétaro debe ser en estricto, el tiempo de Kuri.