Hacer el bien, sin mirar a quién

Si la contienda electoral que se avecina obliga a los servidores públicos – federales, estatales o de los municipios – a ser más eficientes, adelante.

A fin de cuentas es el ciudadano el que sale ganando.

Mejores servicios, más apoyos por esta interminable pandemia, mejor atención ciudadana.

La diferencia no la dará solo un lema de gobierno, sino la dará el ciudadano el día que vaya a la urna, al gobierno más aplicado y de mayores resultados.

Ahí es donde se mide.

Y es que en los últimos meses – y a pesar de la pandemia – en el gobierno municipal de Querétaro se ha apretado el paso.

Sea tal vez para cerrar bien el postrer año de gobierno, sea porque las elecciones están cada vez más cerca. Eso al ciudadano en realidad no le interesa; lo que la gente quiere ver es que no lo están dejando sola ni por la pandemia, ni en los servicios que requiere.

Los programas de apoyo por el coronavirus nunca serán suficientes. Para estos y como nos está pegando a todos – al país, al estado, al municipio – no alcanza ningún dinero.

El mejor esfuerzo y el más preciado es el que se haga para que este mal nos golpee menos a la sociedad, porque – hasta ahora – no se tiene la vacuna que lo detenga en forma total. Y ni sabemos para cuando llegue.

De este paso por una mejor salud, siguen la serie de esfuerzos que se hagan desde el gobierno – ahí si – para paliar la crisis económica, que nos está pegando a todos. Y fuerte.

Por eso es la apertura paulatina de los negocios, de las empresas, de todo tipo de tiendas, de las que ofrecen servicios.

Cierto, no se está haciendo en conjunción con el gobierno federal. Pero eso allá no lo entienden, pero si se está poniendo lo que está localmente a nuestro alcance. Y me refiero a Querétaro.

Y por esta pandemia, ¿Dónde se debe apoyar, como atacar los daños que hace?

No es muy difícil ir por la respuesta, por la muy sencilla razón de que eso se ve a leguas. Uno de los grupos más desprotegidos, son las personas en situación de calle. Y si están ahí es porque no tienen ni para casa, ni para la renta de una casa y, tal vez, ni siquiera para comer.

Y la administración municipal ahí canalizó sus primeros apoyos. Abrió un Centro de Servicio Temporal para personas en situación de calle. Amplió espacios para que tengan, al menos, donde dormir y se les ofrece atención médica a quién lo necesite, entre otros apoyos.

A propósito – y por esta pandemia – el número de personas en situación de calle, ha crecido. Los números no existen porque este fenómeno social aumentó a raíz de la pandemia, pero baste observar cómo están ahora las calles de Querétaro, cuando llevamos ya más de ocho meses en “cuarentena”. Otra cosa – y usted la nota también por el rumbo donde viva – es que a las puertas de su casa, son cada vez más las personas que pasan a ofrecerle algo que les compre, a ofrecer su trabajo en limpieza a la casa o el lavarle su auto, pero también otras más que les pide un taco.

Y ya que estamos en esto, es justo reconocer que el gobierno municipal implementó un Programa de Apoyo Alimentario y que, ahora en pleno azote de la crisis, está repartiendo mil raciones – comidas en caliente – por delegación. Así, este da una cifra diaria, de siete mil comidas y que para muchas familias – donde han perdido empleo, cerrado su negocio o no encuentran acomodo porque sencillamente no lo hay – significa el “hacer el día” con esa comida.

Y solo el que lo recibe y vive una situación desesperada, sabe y aquilata el valor que tiene este apoyo.

Y esto, a la gente que sale de estos lugares donde se entrega comida, se les nota en sus ojos.

Esto es solo una parte de lo que sí y desde el gobierno municipal de Querétaro, se está haciendo.