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En política no existen casualidades

Por Andrés González - 16/05/2019

Las ideas expresadas en las columnas, así como en otros artículos de opinión, no necesariamente corresponden a la línea editorial de Códice Informativo, y solo son responsabilidad del autor.

En la vida hay un axioma que afirma que “no hagas cosas buenas que parezcan malas”, en la política esta tiene una perfecta y muy exacta aplicación

 En política no existen casualidades

En una jugada considerada mayor, la Reforma Educativa – nacional pues – y defendida a capa y espada no solo en las dos Cámaras, sino también desde el Comité Ejecutivo Nacional del PAN, aquí en Querétaro, con un gobernador que es presidente de la CONAGO, se les fue la papa.

En la vida hay un axioma que afirma que “no hagas cosas buenas que parezcan malas”, en la política esta tiene una perfecta y muy exacta aplicación.

Y es que esta jugada – ahora se ve – vino desde arriba. No fue pues casualidad.

La tendencia, argumentos y razones que traía Acción Nacional, desde el mismo día – miércoles ocho – cuando el diputado Felipe Fernando Macías hizo una férrea y razonada exposición contra la Reforma Educativa, ahí, en la Cámara de Diputados, los de MORENA y sus aliados la comenzaron a urdir.

Por requisito de ley, algunas reformas constitucionales requieren – al menos – la mitad más uno para ser publicadas y tomen el rango de Ley. Serían necesarios 17 estados que aprobaran esta reforma. Y a los morenistas y sus aliados – en esta iba el PRI – les cuadraron a la perfección las cuentas. Y hasta les sobraban.

Ahí se decidió que en el primer paquete fueran los estados donde gobernara MORENA – suman ya cinco – más los 12 que tiene el PRI, la suma de ambos les bastaba para alcanzar los 17 requeridos. Y fue con los que empezaron, hasta este miércoles cuando se completó la cifra. En el siguiente paquete irían las once entidades en las que gobierna Acción Nacional pero, mire usted, que no fue necesario.

Sin embargo, el posicionamiento venía desde el mismo miércoles cuando el líder nacional del PAN, Marko Cortés, también reprobaba esa misma Reforma, tal y como sucedió con su bancada en la Cámara de Diputados.

Y ahí fue desde donde se hizo la selección de congresos estatales que habrían de recibir esta reforma para su aprobación.

En virtud de eso, de la señal ya recibida desde el CEN del PAN, es que el CDE de este partido en Querétaro, cobijado por la senadora Lupita Murguía y el diputado federal panista Felifer Macías, salen presurosos en conferencia de prensa a declarar que “aquí, en Querétaro, el Congreso local no aprobaría esta reforma”, porque confiados en sus números – el PAN suma doce diputados, más los del PRI que nacionalmente marcaron línea, más la candidata independiente, no tendrían problema alguno en ser mayoría.

Y se fueron con la presunta línea no solo el diputado Agustín Dorantes, sino también el presidente de la Mesa Directiva, don Antonio Zapata.

Todos los panistas andaban muy ufanos cuando solo un día después, el gobernador del estado Pancho Domínguez Servién señala que “no es sano” que el Congreso de Querétaro detenga esta reforma.

Eran solo “reflexiones para después de la muerte” porque la tarde noche del mismo martes, los morenistas y sus aliados habían cubierto con la mano en la cintura el número cabalístico de 17.

Y por supuesto, como dice Pancho, que hay temas dentro de esta reforma educativa que deberán analizarse, como las referentes a la universalidad y gratuidad de la educación superior – y que afectaría a todas las universidades autónomas del país – y que deberán puntualizarse en las leyes secundarias de esta misma reforma.

No todo está perdido pues para los azules ni para las universidades públicas, porque si bien la batalla central la perdieron, las batallas secundarias siguen vigentes, porque en las leyes secundarias radica muchas veces la operatividad y praxis de la norma superior. La guerra continúa.

Esta jugada que todavía tiene mucho rebote, lo único que evidenció es que, entre el legislativo y el ejecutivo de este estado, no existe el indispensable cabildeo, al menos en las jugadas consideradas mayores. Aquí en esto, no se vio ni el oficio que debiera tener Agustín cuando con una simple llamadita al Ejecutivo, todo se habría salvado. Ni modo de decir que no se tratan o no se conocen. De Zapata, ni que esperar.

Además, cómo que a todos se les olvidó que el hecho de que Pancho es, además, el presidente de la CONAGO, con voto de calidad, el menos, entre sus pares. Y suman once.

Y es que, como están los números en el Congreso de la Unión, tan reducidos y de muy difícil cabildeo, la definición que den los estados resulta de la mayor importancia para hacer posible, defendible pues, el federalismo que da viabilidad y orden a la nación, siendo además el instrumento valedero y constitucional para el desarrollo regional.

En político, “no hagas cosas buenas que parezcan malas”.

Las trabas, creo – por esto y por lo que venga – las podría resentir el Ejecutivo en sus relaciones con el gobierno federal.

Andrés González

Periodista de toda la vida, egresado de la escuela Carlos Septién García, catedrático en la Universidad de Guanajuato, analista político en radio y prensa escrita, además de Premio Estatal de Periodismo en el 2000.


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