×

Busquedas Populares


×

Opinión



Secciones




En el PRI, “tiempo del militante”

Por Andrés González - 03/08/2015

Las ideas expresadas en las columnas, así como en otros artículos de opinión, no necesariamente corresponden a la línea editorial de Códice Informativo, y solo son responsabilidad del autor.

Tras el último informe del gobernador priista José Calzada Rovirosa, en Querétaro el tiempo político corre a otro ritmo. Y no es precisamente el que […]

 En el PRI, “tiempo del militante”

Tras el último informe del gobernador priista José Calzada Rovirosa, en Querétaro el tiempo político corre a otro ritmo.

Y no es precisamente el que marque José Calzada.

Quiénes le dicen al oído a Pepe que todavía es el jefe político del PRI, lo están engañando.

Si el poder está ligado a la autoridad y esta es el principio de su justificación, administrativamente sigue vigente. Políticamente ya no.

Y es que de estos primeros días de agosto y hasta el final de esta administración – 30 de septiembre – en Querétaro y desde el punto de vista político, ya nada pasará. No al menos en el PRI de esta entidad, puesto que se plegará en espera para ser mudo testigo de los cambios nacionales que este mismo instituto político vaya teniendo.

Durante los seis años de este gobierno priista – y según usos y costumbres – José Calzada fue quién ejerció a plenitud estas dos premisas: Usos, costumbres.

Seis también fueron los dirigentes de este partido en Querétaro, todos con la venia del gobernador en turno. Todos.

De estos, solamente uno de ellos fue electo. Y no lo hizo la militancia propiamente dicha, sino que se activó el Consejo Político Estatal para cumplir la indicación.

Ya en plena era calzadista, el primero de ellos fue Hiram Rubio que pasaba a ser interino y que después pasaría a ser Delegado en funciones de Presidente.

Hiram Rubio resultó un petardo político que se apagó por la nula operación política cuando alcanzó la coordinación de los diputados priistas en la LVI legislatura.

Con la misma etiqueta de Delegados Especiales en funciones de Presidente, fueron activados tanto Braulio Guerra Urbiola como Jorge García Quiroz. El paso de ambos por el PRI fue sin sacudidas mayores y libraron con disciplina y operatividad el tiempo que les fue encomendado.

Pero Pepe seguía operando y marcando los tiempos.

Ese sí era su momento.

Así lo entendieron los priistas, los militantes. Y así lo operaron para el arribo de Alonso Landeros, quién sí fue electo por el Consejo Político Estatal. Esa operación la llevó, a pie juntillas, Jorge García Quiroz.

Pero el descuido administrativo que Alonso dejó cuando cubría la responsabilidad como alcalde de Pedro Escobedo, lo hizo trastabillar y es la SCJN la que lo inhabilita por no obedecer una orden de esa instancia.

Y viene el inesperado cambio.

Llevaría Alonso la grave encomienda de conducir el desahogo del segundo periodo político de su gobernador con vistas a las elecciones del 2015. Sí, estas que pasaron, pero ya lo ven, no llegó.

Isabel Aguilar solo operaría brevemente el interinato mientras José Calzada apresuraba al sucesor, precisamente para cumplir este encargo.

El elegido es el Ing. Tonatiuh Salinas en un pronunciamiento inesperado para la militancia, si bien de todos los afectos y cercanías con el gobernador en turno.

Pero “la política no es de afectos…sino de conocimientos y resultados” sostenía desde entonces Jesús Rodríguez Hernández.

“Hoy, el tiempo político de Pepe ha expirado…el tiempo ahora es del militante” enfatiza hoy Rodríguez.

El nuevo juego, con nuevas reglas y nuevos tiempos a la vista – 2018 – está por comenzar.

Andrés González

Periodista de toda la vida, egresado de la escuela Carlos Septién García, catedrático en la Universidad de Guanajuato, analista político en radio y prensa escrita, además de Premio Estatal de Periodismo en el 2000.


Otras notas



De nuestra red editorial