AMLO distrae con su circo de varias pistas

¿Recuerda los circos de tres pistas? ¿No los recuerda o nunca visitó un circo con tres pistas? Les comento. Una vez que iniciaba el espectáculo circense, de forma simultánea en las tres pistas del circo aparecía un espectáculo, de tal manera que el público no podía ver las tres funciones a la vez; o bien cuando veía la función de los payasos, en otra pista aplaudían a los trapecistas, así que el público volteaba para ver la razón de los aplausos, instante en que en otra pista del circo hacían lo mismo con los leones; varios actos a la vez que logran la distracción, pero se pierde la atención.

Conclusión, la simultaneidad de actos circenses impedían ver, a la vez, las tres funciones. Una réplica de las actuaciones circenses es la fórmula que receta a los mexicanos el payaso de Andrés Manuel López Obrador, Presidente de la República. Crea diversas distracciones circenses de manera simultánea, muchas ficticias, atrae y distrae a la mayoría de los mexicanos, pierden atención de aquellos asuntos de trascendencia, de importancia. Tiene comparsas que le acompañan. Los medios de comunicación y periodistas (todos) le ayudan para lograr su objetivo; así lleva López Obrador 21 meses de gobierno, distrayendo intencionalmente a la sociedad para que pasen desapercibidos muchos de los asuntos importantes, aquellos que el propio Manuel López crea para destruir al país. El payaso logra la entretención y distracción del público. En esta ocasión el evento circense de Lozoya, es el mayor acto de entretenimiento, en tanto en otras pistas se suscitan acciones de mayor importancia, López consigue el objetivo con su actuación, entretener y distraer al enajenado público.

Veamos otros asuntos de verdadera envergadura que el payaso de López Obrador, prefiere olvidar, por eso distrae con actos de tercera, utilizando actores de cuarta. Este día el Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo, durante la conferencia mañanera reconoció que el índice de homicidios dolosos ha crecido. Todo un fracaso la política de abrazos y no balazos. De nada ha servido regalar miles de millones de pesos por medio de engañosos y manipulados programas sociales, para, supuestamente bajar la comisión de delitos. 2,890 homicidios violentos en julio pasado; “subió un poquito” dijo el Secretario ¡Sin vergüenzas! La función del teatro Lozoya opaca el incremento de homicidios dolosos. Para los periodistas es más importante recitar los nombres involucrados en supuestos actos de corrupción en tiempos del neoliberalismo. Mientras el público aplaude el acto del payaso y arma una revolución entre denunciante, acusados y el tenebroso autor de la obra: López Obrador. Faltan tres meses para que venza el tercer plazo fijado por López, para reducir el índice delictivo. Lamentablemente no alcanzará la meta autoimpuesta. En esta ocasión el Secretario culpó al “Marro”, por el incremento de los homicidios. Un gobierno que no tiene responsabilidad de nada, solo la de gastar miles de millones del dinero público en las ocurrencias del payaso.

El PIB, se desbarrancó al 18.9%. El payaso culpó a la pandemia del quiebre de la economía del país. Mas no dice que la tendencia a la baja, sin pandemia a la vista, venía cuesta abaja desde el año pasado. López se burlaba de los bajos crecimientos del PIB, en tiempos neoliberales. Prometió que él haría crecer la economía al doble y al término de su sexenio, al triple. No ha sido así. En el primer año decreció más del 100% el crecimiento del PIB. Sus políticas erráticas en materia económica, más los abusos que comete al violentar el Estado de Derecho, por no respetar convenios del gobierno con particulares o cancelar inversiones a mano alzada, eso ha hecho que los inversionistas desistan en su intento por invertir. Y, los pocos que han invertido en este gobierno, más se debe a los proyectos ya iniciados en el sexenio neoliberal de Peña. Temerosos los inversionistas, salvo los consentidos como Carlos Salim, a quien beneficia el payaso mayor con contratos multimillonarios, sin licitación. Los periodistas omiten comentar el tema. El morbo y la diversión es el caso Lozoya, los nombres de los involucrados en la denuncia, eso es lo llamativo.

¿Qué pasa con el empleo en México? La pandemia es la culpable por la pérdida de más de un millón de empleos en lo que va del año. Una vez más, la tendencia venía a la baja desde el 2019. Para colmo, el coordinador de los payasos, ordena cancelar inversiones y creación de empleos a mano alzada, impide la generación al crear nuevas empresas, institucionalización del caos, bloquean vías del tren y carretera, detienen el comercio ¿Y el gobierno dónde está? Ejemplos de problemas hay muchos. Lo cierto que, de acuerdo al último informe del IMSS, tan solo en el mes de junio pasado se perdieron 83 mil, 311 empleos formales; y en lo que va del año se quedaron sin empleo (falta julio y agosto) un millón, 113 mil, 677 trabajadores ¿Alguien sabe qué ha sido de esos trabajadores, de qué viven? Nada. El gobierno del payaso se negó a brindar apoyo a los trabajadores, no a las empresas, para que pudieran conservar el empleo esos trabajadores que hoy navegan en la soledad del anonimato, perdidos entre la fiebre del “Lozoyazo”, este asunto es el importante. Los trabajadores que se las arreglen como puedan, igual sus familias. Mientras el payaso de López se alegra por la contratación o recontratación de 30 mil, personas. Cínicamente dijo: “Nos va a llevar tiempo, pero ya vamos de salida…”. Mientras los periodistas se “desgarran entre ellos” por informar sobre el contenido del escrito de denuncia presentado por Lozoya (36 hojas por un solo lado), a la Fiscalía General de la República ¡Eso es lo importante mediáticamente! Ah, pero el T-MEC, nos iba a sacar del agujero en que nos metió el payaso de Andrés Manuel López, así lo afirmó ¿Dónde están los inversionistas? En otros países que sí garanticen seguridad pública y jurídica.

¿Y la pandemia del Covid-19? ¡Bendita pandemia! Le cayó como anillo al dedo al dueño del circo. Claro, ahora la pandemia es la culpable de todo; maldito coronavirus, es responsable de la falta de insumos médicos, de la escases de medicinas, de la pérdida de empleos, de la falta de inversión, de tanto muerto por el Covid-19 y los asesinatos, también es responsable de que no baje el índice delictivo. Y mientras la pandemia hace de las suyas, el circo de cinco pistas que dirige López Obrador, a la deriva, divirtiendo al público con el espectáculo de Lozoya. Aventando materia “escatológica”, salpicando a medio mundo, todo con el objetivo de desgastar aún más a la oposición, que entre ellos solitos se desangran como en pelea de gallos ¿Y Morena? Ahí está la resolución de este día, en la que la Sala Superior del TEPJ, dejará en manos del INE, el proceso de elección de la dirigencia nacional, para que lleve a cabo el proceso electivo de los morenistas, dado que el tramposo de Alfonso Ramirez Cuellar (otro más), quiere quedarse un año más de dirigente provisional, cuando su periodo venció hace varios meses. En julio pasado la Sala ordenó llevar a cabo la elección, no cumplieron. Hacen gala de su tradición, no respetar ni la ley ni las resoluciones judiciales, pragmatismo que impone el payaso de López Obrador. Ah, pero lo divertido es conocer los nombres de los involucrados en la corrupción generada por el inocente de Lozoya, tema de este día en la mañanera. El Presidente de la República, orquestando la diversión que distrae, se llevó la mayor parte del tiempo en el tema. Distracción pura y segura. En tanto el país a la deriva con un gobierno caracterizado por su ineptitud e incapacidad.