Rara virtud de conocer el tiempo

La cita es puntual, en el día, en la hora.

Es el Segundo Informe del Poder Legislativo en Querétaro.

Van al encuentro de la historia…de la del Poder Legislativo escrita ya en dos de tres partes…la personal que podría estar a unos meses de reescribirse.

“Ojalá que la mayoría de ustedes sean candidatos”, les dijo de buena fe a sus veinticuatro compañeros, el diputado Marco Antonio León Hernández, decano de esta legislatura.

La expresión, si bien ocurrente, también fue excluyente, porque Marco no se incluyó.

Es el último orador y relaja la pesada sesión de casi dos horas. Algunos cuchichean, otros disimulan la risa.

Marco andaba de buenas. No se le notó presionado. Y es que la tensión de las últimas semanas, se vio relajada con el aviso oficial de parte de la Comisión Nacional de Garantías y Disciplina del Partido Movimiento Ciudadano, que notificó a la LVII legislatura que la sanción de seis meses impuesta al diputado, ya había sido cubierta. Una carta notificadora del Lic. Sóstenes Mario Ramírez Bretón al propio José Luis Aguilera Ortiz del pasado 18 de julio – el pasado viernes – le entera lo mismo.

Pero a los 25 diputados el tiempo les gana. Apuraron la responsabilidad actual – “ ésta ha sido la mejor legislatura de Querétaro” comentó el gobernador José Calzada Urquiza – y cumplieron, a decir de la generalidad de ellos, “con Querétaro, con México”, esto último por las recientes leyes secundarias que pasaron por aquí sin ningún problema.

Pero el foro de este informe no fue del todo bien aprovechado.

Los señores diputados de las seis fracciones parlamentarias con presencia en esta legislatura,   si bien cumplieron a secas con sus partidos, sus discursos no fueron más allá de una mera relatoría.

Y es que en esta legislatura, la oposición no existe. Asomó parcialmente con Bernardo Nava, diputado de Acción Nacional; algo con Marco León que adoptó el posicionamiento de Movimiento Ciudadano en el Congreso de la Unión – era de esperarse – para que el resto entrara en la intrascendencia y en la tarea fácil.

Sin embargo – y esto si es rescatable – la intervención en su calidad de presidente de este cuerpo colegiado por parte del diputado Braulio Mario Guerra Urbiola no desmereció. Un discurso a detalle sobre la Agenda Común – antecedente del Pacto por México – alcanzando un histórico 99.9 de consensos logrados, en la friolera de 1127 iniciativas y ya aprobadas, 824 de estas.

Cierto, no es responsabilidad de solo uno de los legisladores, sino que es aportación de voluntades de los 25.

“Hay tiempo para competir y hay tiempo para convenir”, abrió con tino y sutileza, Braulio para agregar que “la política de consenso es la que prestigia a los políticos”. Y este consenso aquí fue apurado, cumplido.

Y es que el menudito legislador priista, se ha dimensionado en este encargo si bien como un conocedor del derecho, igualmente como un gran concertador. Las altas cifras dadas y la calidad de lo aprobado, los han colocado en un nivel al que nunca llegaron todas las legislaturas que les antecedieron en el Querétaro moderno.

Por eso el deseo de León Hernández no fue del todo gratuito.

“Ojalá que todos ustedes sean candidatos”.

Pero en el discurso de este martes, a la generalidad – no a todos – les faltó brillo, garra, ideas.

Ojalá pues, que no todos se la crean.