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La reunión de San Juan

Por Andrés González - 22/09/2014

Las ideas expresadas en las columnas, así como en otros artículos de opinión, no necesariamente corresponden a la línea editorial de Códice Informativo, y solo son responsabilidad del autor.

Cuando Roberto Loyola Vera llegó al espacioso salón del Hotel La Venta – a unos cuantos pasos del famoso río que es agregado al nombre […]

 La reunión de San Juan

Cuando Roberto Loyola Vera llegó al espacioso salón del Hotel La Venta – a unos cuantos pasos del famoso río que es agregado al nombre que la ciudad tiene, San Juan del Río – ya estaba ahí el priista Jesús Rodríguez Hernández, pero también esto ya lo sabía el alcalde queretano.

Y no había razón alguna para suspenderse, si bien Jesús no estaba entre los invitados. “Entre los priistas no tenemos esas descortesías” me dijo uno de los asistentes… “cualquier priista es bienvenido”. Y más ahora que se requiere de todos.

Y es que la reunión que había convocado Hugo Cabrera Ruiz – con amplio poder de convocatoria pues fue ahí delegado – había reunido a lo más granado del priismo de esa localidad; la dirigencia municipal encabezada por Héctor Ramírez López; varios ex presidentes municipales emanados de ese partido como el Ing. Leopoldo Peralta, sanjuanense, alcalde de este municipio en los tiempos de Camacho Guzmán, hoy delegado del PRI en Tequisquiapan; Gustavo Nieto Chávez, delegado de sagarpa; Víctor Rojas Zetina, en el ojo del huracán político en aquella “concertacesión” del 94; también la regidora Martha Teresa Pacheco Jaime; el “eterno” Pedro Mondragón, líder campesino de esta región y diputado local hasta por dos ocasiones; Tania Ruiz, con claro perfil y aspirante a la diputación federal priista por el segundo distrito; el diputado Gerardo Sánchez, hoy mismo en la imaginaria a la alcaldía de San Juan; representantes de las mujeres priistas del municipio, de los jóvenes; en suma, unos sesenta importantes del PRI sanjuanense.

Y ahí a eso de las siete y media, a la entrada del salón, recibía a los invitados el propio Hugo Cabrera. Apenas diez minutos después llegaba Jesús Rodríguez. “Chucho” le dicen.

La mesa había sido puesta a manera de herradura. A las ocho, ya casi todo los lugares estaban ocupados.

La reunión es producto de los tiempos. Se abren las opiniones, se intensifica el diálogo. Se ven todas las cartas, se analizan. La política en el PRI, en todos los partidos, es ahora, “un lugar para ver y ser visto” como el slogan de un centro comercial. De eso se trata.

A eso de las ocho y cuarto, llega Roberto Loyola Vera que, como coordinador de los alcaldes priistas, había sido invitado por Hugo para esta reunión. Sería además, interesante oírlo. Y a Chucho, ya que estaba ahí. Son – y nadie lo puede negar – dos de los más fuertes aspirantes a la gubernatura por este partido.

La bienvenida corre a cargo de Hugo. Agradece a todos su presencia, a todos, para destacar los nombres de algunos por su condición y responsabilidad de partido. “Nos acompaña – puntualizó el anfitrión – el Lic. Jesús Rodríguez Hernández, distinguido priista y ex presidente estatal de nuestro instituto político”. Jesús agradece discretamente la deferencia.

Y son las mujeres las que toman primero la palabra. Piden, reclaman, que se abra la oportunidad de participar…”y en su momento – le dicen a Roberto – nos gustaría que usted encabece la candidatura de nuestro partido a la gubernatura”. Parece que esto no le cae a Jesús.

Y la reunión se tensa.

Pero Roberto contextualiza y destaca por su parte, la presencia de Jesús Rodríguez, “con quién he tenido la oportunidad de ser compañero de trabajo”.

Y le sigue Jesús: Muy a su modo, Rodríguez expone que los tiempos de promoción política “no han llegado” (¿?)…habla de encuestas – no dijo cuales – que “son fotografías de determinado momento” y dirigiéndose al presidente del comité municipal, Héctor Ramírez López le precisa el porqué de este tipo de reuniones.

Pero la precisión incomoda. Cuando Jesús termina de hablar, pide la palabra Ramírez López, para – sin que lo dijera – alusiones personales. En forma tranquila y sensata, le responde que “el priismo no excluye a nadie” de modo que cuando en San Juan se realice este tipo de reuniones, “usted señor licenciado Rodríguez, será bienvenido”.

Dicho esto – y no por eso – Jesús Rodríguez anuncia que “por un compromiso” se retira de la reunión.

– Le pediría, señor licenciado, que nos acompañara unos minutos más. Dijo Roberto.

Y Jesús permanece sentado en su lugar.

Roberto entonces habla de la necesidad de “caminar en unidad” pensando más en la unidad de todos que en situaciones que aún no se definen.

Cuando termina Roberto, Jesús insiste en retirarse. Se para de su asiento y se despide de mano de todos los ahí presentes.

Cuando llega con Roberto – estaba a su lado Hugo Cabrera – el saludo es cordial. “Nos hablamos en la semana” se dijeron.

Y la reunión, con varias intervenciones más, siguió, como si Jesús nunca hubiera estado ahí.

Son los tiempos.

Andrés González

Periodista de toda la vida, egresado de la escuela Carlos Septién García, catedrático en la Universidad de Guanajuato, analista político en radio y prensa escrita, además de Premio Estatal de Periodismo en el 2000.


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