DDHQ emite recomendación a Jalpan de Serra por agresión de policías
Pide que se inicien procedimiento penales y administrativos
La Defensoría de los Derechos Humanos del estado de Querétaro (DDHQ) emitió este jueves una recomendación a Saúl Trejo Altamirano, presidente municipal de Jalpan de Serra, por la agresión que policías municipales tuvieron contra dos ciudadanos tras detenerles, sin que se les haya procesado por la presunta comisión de algún delito. Además, se incluye también en la recomendación, por actuación irregular, al Juez Cívico y Contralor de dicho municipio.
El 23 de noviembre de 2013, se llevó a cabo una festividad en el Auditorio de Pueblo de Jalpan de Serra, a la que asistieron los dos quejosos, sus hermanos menores de edad, y dos personas más. Tras una riña que se suscitó en el lugar, los dos quejosos y sus acompañantes fueron detenidos por policías municipales, según refiere la DDHQ de manera violenta.
“Aun cuando los policías justificaban su actuar aludiendo que los hechos eran probablemente constitutivos de delito, existió una violación a los derechos de los quejosos, ya que estos no fueron puestos a disposición del Ministerio Público, sino ante el Juez Cívico Municipal por faltas administrativas, lo que resulta ilegal“, establece la DDHQ.
Felipe y Jorge, como los identifica la Defensoría, fueron agredidos por dos oficiales de policía; uno de ellos se quitó el casco y los golpeó en diferentes partes del cuerpo, también pateó en el estómago a Jorge hasta dejarlo sofocado.
“Es importante precisar que las lesiones por el abuso de poder de los policías ocurrieron posteriores a la valoración médica dentro de la Comandancia advirtiéndose con claridad que los mismos fueron ejecutados dentro de las instalaciones de la cárcel Municipal“.
Jorge tuvo que ser intervenido al presentar una perforación en el intestino, como consecuencia de los golpes de los cuales fue objeto por los elementos policiacos.
Miguel Nava Alvarado, titular de la DDHQ, aseguró que el Juez Cívico violo Derechos Humanos ya que omitió cuidar el estado físico de los detenidos, mientras que el Contralor municipal fue omiso al no realizar las acciones pertinentes en relación con las actuaciones de los policías agresores.