La guerra no debe arrebatar la diginidad: Zainad Salbi en Querétaro
La creadora de Women for Women International participó de la cumbre Un Millón de Jóvenes por México
Respetar la dignidad de las personas es la mejor manera de ayudarlas, sentenció Zainad Salbi, activista por la paz que participó de la primera cumbre “Un millón de jóvenes por México”, que se llevó a cabo en el Querétaro Centro de Congresos, con la ponencia “Mujeres, Guerra y Paz”.
La iraquí-americana , creadora del organismo Women for Women International, indicó que tras 20 años de actividades, y haber empezado con el apoyo de 30 mujeres, hoy en día ya se han ayudado a más de 370 mil mujeres inmiscuidas en conflictos bélicos en todo el mundo.
Women for Women International es un institución sin ánimos de lucro que apoya a mujeres sobrevivientes de guerras en todo el planeta de manera práctica y moral. Y es precisamente la parte moral en la que enfocó Zainad Salbi en su ponencia, ya que, dijo, sólo respetando a las personas se les puede ayudar de manera correcta.
Zainad Salbi aseguró que una de las principales lecciones que ha recibido en sus años de servicios fue la de aprender a escuchar, ya que esta es la mejor manera de ayudar y servir a la gente, porque solo así se entienden las verdaderas necesidades que tiene alguien en una situación de desgracia.
Para la multigalardonada por su trabajo humanitaria en conflictos bélicos como el de Bosnia a principios de la década de los 90´s afirmó que no se trata solo de dar, sino cómo se da, ya que la gente entiende y siente la forma en la que proviene la ayuda. Sólo así se puede tender un verdadero puente de paz entre quien da y quien recibe.
Y es que no dar la ayuda de buena manera provoca una falta de respeto hacia quien está necesitado, y esto, aseguró, provoca corrupción.
Puso como ejemplo a Siria, que en estos momentos vive condiciones difíciles por los conflictos civiles de los últimos meses, y en donde miles de mujeres se encuentran en un estado vulnerable. Hay hombres que les ofrecen su ayuda, pero a cambio de poder casarse con sus hijas, algo que provoca un sentimiento de vacío en esas mujeres y les hacer pensar que han perdido, además de todo lo que les ha arrebatado la guerra, su dignidad.
En Women for Women International, dijo, se les otorga a las mujeres trabajos reales en espacios seguros , respetando su dignidad como personas, y devolviéndoles así la esperanza.
Otra lección que ha recibido en sus años de servicios es la de compartir las historias. Zainad Salbi recordó la historia de una mujer mayor de 50 años que había sido violada junto a su hija por soldados en una guerra. La mujer, que era analfabeta, se quiso rehusar al ataque y por recibió un disparo en la pierna. Cuando Women for Women International acudió en su ayuda, la mujer le dijo:
“Si pudiera contarle al mundo mi historia lo haría para que otras mujeres no pasen lo que yo he pasado. Yo no puedo, tú ve y diles, sólo no le cuentes a los vecinos”, lo que provocó el llanto de la activista y la motivó a escribir el libro Between Two Worlds Escape from Tyranny: Growing up in the Shadow of Saddam en el que cuenta su historia.
Para finalizar, Zainad Salbi hizo un llamado a los jóvenes para que se despojen del miedo, ya que este sentimiento detiene el crecimiento y no permite tomar acciones para mejorar la realidad que se vive. Explicó que con miedo habría sido imposible adentrarse en Kenia, Congo, Irak, entre otros países, a ayudar a las mujeres afectadas por la guerra.
“Si queremos tener héroes, tenemos que ser valientes en nuestra propia vida”, afirmó la activista antes de despedirse de los más de mil jóvenes que presenciaron su discurso.